La Casa Cultural Sala Mínima, en la ciudad de Pasto, acogió una velada llena de simbolismo y tradición. La compañía Danzantes del Sur presentó la obra Espíritus del Urkunina: los diablos de Obonuco, una puesta en escena que recupera una antigua leyenda del corregimiento de Obonuco. En esta historia, el diablo surge desde el volcán para unirse, bailando, a las festividades del pueblo.

La obra combinó danza, música y elementos visuales para representar el relato que los mayores han transmitido durante generaciones. De esta forma, los artistas lograron mantener viva una parte fundamental del imaginario colectivo del sur de Colombia. Además, la puesta en escena utilizó símbolos del entorno natural para reforzar la conexión con el territorio y la memoria ancestral.

Cada movimiento reflejó la fuerza espiritual de este mito. A través de coreografías cuidadosamente diseñadas, los intérpretes expresaron el vínculo profundo entre el ser humano, la tierra y lo sagrado. Por esta razón, el público no solo presenció un espectáculo estético, sino también una experiencia cargada de emoción y significado.

Por otro lado, esta obra representa una estrategia clave para preservar la identidad cultural. En lugar de quedarse en el relato oral, Espíritus del Urkunina lo lleva a un lenguaje visual y corporal. Así, alcanza a nuevas generaciones que quizá no hayan escuchado la historia directamente.

Finalmente, la presentación reafirma el valor del arte como herramienta de transformación. Pasto continúa posicionándose como un territorio fértil para la expresión artística con sentido, donde la danza no solo entretiene, sino también educa, conecta y fortalece a la comunidad.