Gobierno explica su plan para los emberás en BogotáGobierno explica su plan para los emberás en Bogotá

Gobierno explica su plan para los emberás desplazados en Bogotá

El Gobierno nacional presentó ante el Congreso su hoja de ruta para atender a los emberás desplazados en Bogotá, una situación humanitaria que ha cobrado relevancia en los últimos años. Con una estrategia centrada en el retorno voluntario, la reubicación o la integración local, se busca ofrecer soluciones dignas y sostenibles para esta población indígena.

Coordinación interinstitucional para soluciones duraderas

La Unidad para las Víctimas, el Ministerio del Interior y entidades del Sistema Nacional de Atención a Víctimas (SNARIV) han liderado la respuesta, trabajando junto a alcaldías locales de Chocó y Risaralda. Una mesa técnica nacional, liderada por DAPRE, ha articulado esfuerzos para consolidar opciones claras de retorno o permanencia, con enfoque diferencial y participación comunitaria.

Este trabajo conjunto ha permitido avanzar en procesos de caracterización y diálogo, claves para identificar las necesidades de cada familia y evitar respuestas homogéneas.

Avances en retorno y asistencia humanitaria

El Gobierno destacó que más de 678 personas, pertenecientes a 299 hogares emberá, han sido acompañadas en su retorno voluntario a sus territorios. Además, se han invertido más de $3.700 millones de pesos en atención humanitaria, incluidos kits de alimentos y aseo entregados en las Unidades de Protección Integral (UPI) La Rioja y La Florida.

La presencia institucional se ha mantenido en los resguardos de origen, especialmente en el Alto Andágueda (Chocó), donde se continúa verificando la viabilidad del retorno.

Retos estructurales: albergues y fragmentación comunitaria

Uno de los principales desafíos es la condición de los albergues temporales. La UPI La Rioja ha sido objeto de críticas por sus deficiencias, lo que motivó un fallo judicial que exige mejorar sus condiciones. El Gobierno hizo un llamado urgente a la Alcaldía de Bogotá para cumplir con estas disposiciones y garantizar condiciones dignas de alojamiento.

Otro reto es la fragmentación interna en las comunidades emberá, que complica la identificación de voceros legítimos. Esta situación ha generado tensiones y demoras en los procesos de diálogo y retorno.

Próximos pasos del Gobierno

El Ejecutivo anunció que convocará una nueva sesión del SNARIV con todas las entidades responsables, para definir roles y plazos concretos. También se espera la activa participación del Distrito, especialmente de la Secretaría de Integración Social, para asegurar el funcionamiento adecuado de las UPI.

Este enfoque integral busca no solo resolver la emergencia actual, sino también sentar las bases para una solución estructural y respetuosa de los derechos de los pueblos indígenas.