En los caminos rurales, en las calles de los barrios y en los espacios comunitarios, cada día se hace más evidente el respaldo hacia Alejandra Abásolo. Su liderazgo no se ha construido de la noche a la mañana, sino que es el resultado de años de trabajo constante, cercano y comprometido con la gente.

Politóloga egresada de la Universidad Pública del Cauca, Alejandra Abásolo cuenta con una amplia trayectoria en procesos de desarrollo territorial. Ha trabajado en distintas regiones del país como asesora y líder de proyectos estratégicos, sumando experiencias que hoy le permiten tener una visión integral sobre los desafíos sociales y económicos. De toda esa experiencia, los últimos quince años los ha dedicado de manera permanente a Nariño, territorio que reconoce como su casa y su mayor compromiso.

Importantes raíces

Pastusa de nacimiento, hija de padre oriundo de Córdoba y madre de La Florida, Alejandra ha hecho de sus raíces un punto de partida para valorar la diversidad de su gente. En su hoja de vida destacan responsabilidades clave: fue secretaria de Cultura y Turismo en Popayán, donde promovió la identidad y la innovación cultural; y en Pasto, se desempeñó como cluster manager de la Cámara de Comercio, impulsando la competitividad regional y la articulación empresarial.

Su vida profesional, sin embargo, no está desligada de lo personal. Alejandra es madre de dos hijos y desde hace quince años comparte su camino con quien describe como el amor de su vida y su compañero de ruta. Esa base familiar ha sido el motor de su vocación de servicio, porque entiende que el bienestar de las comunidades se refleja en familias que pueden crecer con dignidad, educación y oportunidades.

Causas colectivas

Quienes la conocen destacan su capacidad de escucha, su sencillez y la forma en que convierte las preocupaciones de la gente en causas colectivas. No es extraño verla en una tienda rural conversando con campesinos, compartiendo con mujeres emprendedoras o dialogando con jóvenes sobre sus sueños y proyectos de vida. Esa cercanía, unida a su preparación y experiencia, ha forjado un liderazgo que inspira confianza y respeto.

El respaldo que crece día a día hacia Alejandra Abásolo es la mejor muestra de que la coherencia y la empatía pueden convertirse en puentes sólidos entre la gente y sus liderazgos. En ella, las comunidades han encontrado una voz firme, transparente y sensible, que no solo conoce el territorio, sino que lo recorre y lo abraza con la certeza de pertenecerle.