En el II Foro Global Gateway celebrado en Bruselas, el presidente Gustavo Petro presentó una propuesta integral para enfrentar la crisis climática y la fragmentación política del mundo, planteando a la Amazonía como eje central de integración global. El mandatario colombiano destacó que la selva, a la que llamó “el corazón vital del planeta”, puede convertirse en un corredor de conocimiento, comunicación y energía limpia que conecte distintas regiones del mundo.

Entre las iniciativas mencionadas, resaltó el proyecto de fibra óptica subfluvial impulsado por Brasil y Colombia, que busca enlazar a las comunidades amazónicas y que podría extenderse hasta el Pacífico colombiano, fortaleciendo la conectividad digital de la región. Petro insistió en que la humanidad vive un momento de inestabilidad geopolítica y que la respuesta debe ser la cooperación internacional y no el aislamiento. En ese sentido, propuso la realización de una Cumbre CELAC–África, en Brasil o Cabo Verde, como espacio para articular lazos políticos, económicos y ambientales entre América Latina, África, Asia y Europa.

El presidente también presentó una iniciativa de interconexión energética regional, señalando que América del Sur podría generar hasta 1.400 gigavatios de energía limpia al año, cifra que supera la demanda energética actual de Estados Unidos (1.200 gigavatios). Según Petro, con una inversión estimada en 500 mil millones de dólares, esta capacidad renovable podría sustituir buena parte del consumo de combustibles fósiles y aportar hasta un 30 % a la solución de la crisis climática mundial.

Con esta visión, Petro reafirmó su apuesta por una Amazonía entendida no solo como pulmón ambiental, sino como motor estratégico de integración tecnológica, digital y energética. Para el mandatario, el futuro del planeta depende de conectar el conocimiento y la cooperación desde esta región, lo que permitiría al Sur Global posicionarse como protagonista en la construcción de una nueva arquitectura internacional frente a la emergencia climática.