Este miércoles 15 de octubre, el mundo conmemora el Día Mundial del Lavado de Manos, una fecha que busca concienciar sobre la importancia de este hábito esencial para la salud pública. Lavarse las manos con agua y jabón es una acción sencilla, pero poderosa: previene enfermedades, protege comunidades y salva vidas.

Un gesto vital, pero no universal
Aunque parece una rutina cotidiana, más de 2 mil millones de personas en el mundo no tienen acceso a instalaciones básicas para lavarse las manos, según datos de la OMS y UNICEF. Esta realidad afecta especialmente a zonas rurales, comunidades vulnerables y regiones en crisis humanitaria, donde el agua limpia y el jabón son bienes escasos.
Reyes Pesqueira Puyol, enfermera cooperante con más de dos décadas de experiencia, lo resume con claridad: “Una acción de 40 segundos puede salvar vidas”. En su trabajo en terreno, ha visto cómo la higiene de manos marca la diferencia entre la salud y la enfermedad, especialmente en contextos donde el acceso a servicios básicos es limitado.
Más que prevención: una estrategia global
El lavado de manos no es un gesto aislado. Forma parte de las Precauciones Universales en salud y es una de las principales estrategias de Prevención y Control de Infecciones (PCI). Junto con el uso adecuado del equipo de protección personal, la limpieza ambiental y la gestión segura de residuos, este hábito protege tanto a pacientes como a profesionales.
Además, organizaciones como la Cruz Roja y la Media Luna Roja destacan cómo el lavado de manos fortalece comunidades, reduce la propagación de enfermedades mortales y mejora la resiliencia frente a epidemias.
Educación, acceso y compromiso
Este día también invita a reflexionar sobre las desigualdades en el acceso a la higiene. Escuelas sin lavamanos, centros de salud sin agua corriente y hogares sin jabón son parte de una realidad que debe cambiar. Invertir en infraestructura, promover campañas educativas y garantizar el acceso universal son pasos urgentes.
En Colombia, diversas iniciativas comunitarias han demostrado que con creatividad y compromiso es posible mejorar las condiciones de higiene, incluso en contextos difíciles. Desde estaciones portátiles hasta talleres escolares, el mensaje se multiplica: lavarse las manos salva vidas.
Un llamado a la acción
El Día Mundial del Lavado de Manos no solo celebra un hábito saludable. Es un llamado global a garantizar que nadie quede excluido de este derecho básico. Porque cuidar la salud empieza por las manos, y cada gesto cuenta.
