El gobierno de Ucrania anunció oficialmente el cierre de su embajada en La Habana, una medida que marca un nuevo capítulo en la relación bilateral con la isla. La decisión llega apenas días después de que Kiev votara en contra de la resolución de la ONU que pide poner fin al embargo económico de Estados Unidos contra Cuba.
El anuncio fue realizado por el ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Andriy Sybiha, a través de su cuenta oficial en la red social X, donde afirmó que la medida responde a una “serie de razones políticas y de seguridad”.
Una ruptura tras años de tensiones
Durante años, Ucrania y Cuba mantuvieron relaciones diplomáticas estables, pero la invasión rusa a Ucrania en 2022 cambió el panorama. Kiev acusa a La Habana de no actuar frente al reclutamiento de ciudadanos cubanos que habrían sido enviados a combatir junto a las fuerzas rusas, un hecho que, según el gobierno ucraniano, constituye una forma indirecta de apoyo a la agresión del Kremlin.
Sybiha explicó que, ante la falta de cooperación de las autoridades cubanas y su postura frente al conflicto, el país decidió rebajar el nivel de sus relaciones diplomáticas y proceder al cierre de la sede en la capital cubana.
El voto que marcó distancia en la ONU
El punto de quiebre llegó con la más reciente votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Mientras 187 países apoyaron la resolución que exige el fin del embargo estadounidense a Cuba, Ucrania se alineó con Estados Unidos e Israel al votar en contra, rompiendo la unanimidad casi total que históricamente respalda a la isla en este tema.
Para Kiev, el embargo “no es el centro del problema”, sino la falta de democracia y apoyo al autoritarismo en el régimen cubano.
La respuesta del gobierno de La Habana fue inmediata, calificando la postura de Ucrania como “injustificada y hostil”.
Sin ruptura total, pero con distanciamiento diplomático
Aunque la decisión implica el cierre de la embajada ucraniana en La Habana, no se trata de una ruptura total. Fuentes del Ministerio de Exteriores aclararon que los servicios consulares podrían ser asumidos por otra representación diplomática en la región.
Sin embargo, el gesto simbólico tiene un peso importante: refleja la creciente división política global entre países que respaldan a Rusia y los que condenan su invasión.
El cierre también podría afectar a cientos de ciudadanos cubanos que residen o estudian en Ucrania y que dependían de la embajada para trámites y asistencia consular.
Contexto internacional
La medida se suma a otras acciones con las que Ucrania busca aislar diplomáticamente a los aliados de Moscú.
Cuba, por su parte, mantiene su discurso de neutralidad, pero sus relaciones históricas con Rusia continúan siendo estrechas.
Con este paso, Kiev envía un mensaje claro: no habrá tolerancia hacia países que respalden directa o indirectamente la agresión rusa.
El cierre de la embajada, aunque no definitivo en términos diplomáticos, consolida un distanciamiento político que podría prolongarse en los próximos años.