En la más reciente sesión ordinaria de la Comisión Primera de Hacienda y Asuntos Económicos, la diputada Victoria Eugenia Castro Silva asumió el liderazgo de la ponencia para el primer debate del Proyecto de Ordenanza No. 040 de 2025, que busca adicionar al presupuesto del Huila $30.522 millones para nuevas inversiones estratégicas. Sin embargo, la discusión no pasó desapercibida: el foco estuvo en el estadio de Neiva, una infraestructura que, entre promesas y diagnósticos, se ha convertido en símbolo de gestión y deuda pública.
La diputada Castro Silva, con tono firme y mirada crítica, insistió en que la adición presupuestal debe traducirse en obras concretas y sostenibles, no en simples ajustes contables. “El departamento no necesita más anuncios, sino resultados que impacten a la ciudadanía”, enfatizó durante su intervención, marcando distancia de la burocracia que históricamente ha frenado los proyectos deportivos y de infraestructura.
A la sesión asistieron funcionarios clave del gobierno departamental y municipal, entre ellos Diana Patricia Sierra Sánchez, secretaria de Hacienda; Andrés Camilo Cabrera Leiva, secretario de Vías e Infraestructura; Felipe Victoria Barragán, director del InderHuila; Camilo Gómez, director de Planeación de Neiva, y Juan Camilo Muñoz, secretario de Recreación y Deportes de Neiva. Todos fueron citados para rendir cuentas sobre la ejecución real de los recursos y los proyectos priorizados dentro del nuevo ajuste financiero.
El debate dejó al descubierto las tensiones entre planeación y ejecución, pues mientras algunos funcionarios defendieron la distribución del presupuesto como un impulso al desarrollo regional, Castro Silva advirtió sobre la falta de seguimiento técnico y la escasa claridad en los indicadores de impacto. Su posición, más allá de política, fue técnica y fiscal: “El dinero público no se improvisa; se planifica con rigor y se ejecuta con responsabilidad”.
El proyecto, que ahora pasa a plenaria para su aprobación definitiva, determinará el rumbo de las inversiones del Huila en sectores como infraestructura vial, deporte y desarrollo social. Sin embargo, el tono del debate deja claro que la Asamblea no está dispuesta a aprobar sin cuestionar.
Victoria Eugenia Castro Silva emerge así como una de las voces más críticas dentro del recinto, una diputada que no teme interpelar al Ejecutivo y exigir transparencia. Su postura reafirma que la política regional necesita menos aplausos y más control, menos discursos y más ejecución. Si el presupuesto se aprueba bajo su lupa, al menos quedará la garantía de que cada peso invertido tendrá una mirada vigilante.
Una sesión más que técnica, fue una muestra del pulso político que se avecina en la Asamblea: el de una diputada que no se conforma con oír cifras, sino que exige ver resultados.
