El terreno conocido como “Los Lirios”, ubicado en el municipio de Aldana y avaluado en $598 millones, fue finalmente donado a la Alcaldía de Ipiales mediante la escritura pública No. 1526 del 8 de octubre de 2025, tras una ola de críticas por un presunto conflicto de intereses que involucraba a funcionarios de la actual administración.
La propiedad, de aproximadamente dos hectáreas, había sido destinada inicialmente para la construcción de la nueva bocatoma municipal. Sin embargo, la intención de compra por parte del gobierno local desató controversia pública debido al alto costo del predio y a la relación familiar de sus propietarios con el concejal y pastor Adrián Guerrero, integrante de la coalición de gobierno del alcalde Amílcar Pantoja.
Ante la presión social y los señalamientos, los propietarios del lote decidieron cederlo gratuitamente al municipio, en un intento por disipar las dudas sobre la transparencia del proceso.
Trámite en el Concejo Municipal
El procedimiento para la aceptación de la donación fue remitido a la Comisión Segunda del Concejo Municipal, presidida por el concejal Iván Darío Chalaca, y no a la Comisión Primera, donde se encuentra representada la oposición. De manera llamativa, el ponente del proyecto fue el propio concejal Adrián Guerrero, lo que generó nuevas inquietudes sobre la imparcialidad y legalidad del trámite.
De acuerdo con los procedimientos internos del Concejo, la comisión correspondiente debía evaluar si existía o no un conflicto de intereses, revisar el Certificado de Libertad y Tradición, así como el avalúo comercial del inmueble antes de emitir concepto favorable.
Observaciones legales
La normativa establece que toda donación de bienes inmuebles a entidades públicas debe detallar su destinación específica, incorporarse formalmente al presupuesto municipal y contar con la aprobación del Concejo antes de ser registrada ante la Oficina de Instrumentos Públicos.
En este caso, la registradora de instrumentos públicos, María Victoria Caicedo Calderón, decidió devolver la escritura, argumentando la necesidad de completar todos los requisitos legales y administrativos para garantizar un proceso transparente y evitar eventuales sanciones disciplinarias.
Esta decisión busca blindar el trámite frente a posibles observaciones de la Contraloría General y la Procuraduría, que podrían intervenir si se detectan irregularidades en el manejo del patrimonio público.
Aunque la donación del lote “Los Lirios” parece cerrar momentáneamente el polémico episodio, el registro legal del predio aún se encuentra en revisión, a la espera de que se cumplan todos los procedimientos exigidos por la ley y se garantice la plena transparencia en las actuaciones de la administración municipal.