Detrás de la banda y el título de Señor Nariño 2025 hay una historia de superación, identidad y amor por la tierra. Johan Felipe López Ágreda, conocido por su carisma y alegría, no siempre fue así: de niño era introvertido y dudaba de sus capacidades.
Con el tiempo comprendió que debía fortalecerse y creer en sí mismo. Hoy, convertido en símbolo de orgullo nariñense, demuestra que los sueños se alcanzan con disciplina, constancia y gratitud.
Representar a Nariño, afirma Johan, no es solo desfilar ni posar ante las cámaras, sino honrar las raíces y transmitir valores. Su historia refleja la lucha de su familia, el respeto por su padre y la enseñanza de que cada oportunidad deja una lección.
Gracias al apoyo de figuras como Viviana Gómez y Juan Camilo Torres, Johan aprendió a superar el miedo al qué dirán y a romper estereotipos, entendiendo que la belleza también puede ser un espacio para educar y transformar.
Hoy, además de su faceta como modelo, dirige una academia de cejas y pestañas, y continúa preparándose junto al equipo de Misología, bajo la guía de Juan Pablo y con el vestuario de Sandra Meneses.
Su mensaje es claro: ningún sueño es pequeño cuando se defiende con esfuerzo y corazón nariñense.

