Qué se sabe hasta ahora sobre el caso

El homicidio ocurrió el 2 de diciembre de 2025 en la localidad de Usaquén (norte de Bogotá), cuando Bossard fue abordado por dos delincuentes en motocicleta que intentaron robarle. Uno de ellos le disparó, causándole la muerte.

Uno de los presuntos responsables es un adolescente de 16 años, capturado en flagrancia tras el crimen.

La Fiscalía le imputó varios cargos: homicidio, porte ilegal de arma de fuego, tentativa de hurto calificado agravado — entre otros. El menor aceptó tres de estos cargos.

Un juez ordenó su internamiento preventivo en un centro especializado para menores.

Importante: ya había antecedentes — estaba bajo “libertad vigilada”

Según lo señalado por Galán, el adolescente había sido capturado en mayo de 2025 por hurto calificado.

Luego, en octubre de 2025, un juez le otorgó la medida de “libertad vigilada” como sanción.

Fue precisamente bajo esa figura de libertad vigilada que habría cometido el nuevo homicidio.

Además, según las autoridades, el menor no había sido incorporado en un programa de justicia restaurativa — una herramienta que suele usarse para prevenir reincidencias entre jóvenes infractores.

Lo que dice el alcalde y las implicaciones del caso

El alcalde Galán ha señalado este caso como evidencia de fallos en la justicia juvenil: que un menor con antecedentes y bajo vigilancia terminara cometiendo un delito aún más grave.

Considera urgente revisar las herramientas legales y judiciales para evitar la reincidencia en menores infractores, y propone una “discusión de país” sobre cómo prevenir que jóvenes vuelvan a delinquir en esas condiciones.

Este hecho reaviva el debate sobre la efectividad de sanciones como la libertad vigilada — en especial cuando hay antecedentes de violencia — y plantea cuestionamientos sobre la protección de la ciudadanía.

Conclusión: un caso que pone en evidencia fallas estructurales

Este crimen, además de la tragedia personal de la víctima, ilumina posibles deficiencias del sistema de justicia y rehabilitación juvenil en Colombia: un menor con antecedentes violentos, que ya había sido sancionado, volvió a delinquir cometiendo asesinato mientras cumplía sanción bajo libertad vigilada. Esto exige un análisis más profundo de cuándo la vigilancia suficiente, de qué tipo, y bajo qué condiciones, realmente previene nuevos delitos.