Qué pasó: crimen + suicidio en el Cantón Norte

La tarde-noche del miércoles 26 de noviembre de 2025, dentro del parqueadero del batallón Córdoba — en el Cantón Norte — se escucharon detonaciones.

Al acudir al lugar, las autoridades encontraron a dos oficiales muertos dentro de un vehículo gris: la María Camila Mora Mahecha — subteniente del Ejército — y el Pablo Andrés Masmela Zapata — capitán que, según las primeras versiones, sería el agresor.

Una tercera subteniente, amiga de Mora, se encontraba en la parte trasera del vehículo: su testimonio preliminar indica que Masmela “sacó un arma y le disparó en por lo menos cinco ocasiones” contra Mora, antes de quitarse la vida.

Las primeras hipótesis apuntan a que se trató de un feminicidio seguido de suicidio, aunque la clasificación penal formal aún no ha sido confirmada.

Qué encontraron las autoridades: armas ocultas y preguntas sobre seguridad interna

Dentro del vehículo se localizó una pistola, presuntamente la usada en el crimen.

Pero, además, al hacer la inspección en la habitación del capitán Masmela — dentro del complejo militar — los investigadores encontraron dos armas adicionales.

El hallazgo de esas armas no oficiales — que según el mando no estaban registradas como parte de su dotación — plantea serias dudas sobre los controles internos de seguridad, el acceso, y la entrada de armas a zonas de alta seguridad militar.

Según el comandante del Ejército, Luis Emilio Cardozo, la Fiscalía y peritos del CTI ya iniciaron el rastreo balístico y legal de esas armas para determinar su procedencia y si su porte era legal.

Implicaciones institucionales y debate público

Este caso ha reavivado cuestionamientos sobre:

Los protocolos de seguridad y control de armas en áreas restringidas del Ejército, como el Cantón Norte.

La gestión de riesgos interno y los procesos de selección, salud mental y supervisión entre oficiales.

Las relaciones interpersonales dentro de la institución, y cómo conflictos privados pueden terminar en tragedias, lo que pone en evidencia la necesidad de acompañamiento psicológico y canales de apoyo efectivos.

Las autoridades anunciaron que cooperarán plenamente con la justicia para esclarecer las circunstancias del hecho, mientras se revisan los protocolos internos.