Un hombre fue asesinado en el barrio Chapinero, en la vereda Juan Atalaya, Cúcuta. La víctima, identificada como Wilson Camilo Ortega Sarabia, de 24 años, recibió 22 disparos la tarde del 14 de enero, según las autoridades policiales.
Algunos testigos indicaron que las detonaciones sonaron como una ráfaga, similar a un espectáculo de pólvora durante la época navideña, pero lo que nunca imaginaron es que se trataba de un matón acabando con la vida de uno de sus vecinos.
«Yo estaba haciendo los quehaceres de la casa cuando empecé a escuchar ese estallido y pensé que era pólvora, pero al momento vi que la gente corría diciendo que habían matado a alguien», recordó un hombre que por temor a represalia prefirió ocultar su identidad.
El pistolero, que se desplazaba en una motocicleta Libero, se acercó al frente de la casa de la víctima y sin mediar palabra descargó su arma de fuego en su contra. «Él estaba en el porche de la casa, al parecer jugando con un menor y en ese momento empezaron a dispararle y aunque trató de esconderse en la sala, el pistolero no dejó de sacar el arma hasta que lo vio caer muerto», dijo una fuente judicial.
Las autoridades investigan si en el crimen también participó otro hombre que, al parecer, pasó por la casa y señaló al autor del crimen que allí estaba la víctima. «Estamos investigando y ya tenemos algunos indicios de quién pudo haber originado el homicidio. Es un tema que está avanzando y esperamos tener resultados pronto», insistió la fuente.
Puede leer: Hallan varios cuerpos calcinados en Riohacha, entre las víctimas, una mujer embarazada
¿Ajuste de cuentas? Víctima participó en un secuestro en 2017
En octubre de 2017, la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) capturó a Wilson Ortega, junto a dos hombres más, cuando custodiaban a una persona, de 19 años, a quien presuntamente tenían secuestrada en una casa ubicada en La Parada, en Villa del Rosario.
Los gritos de auxilio de la víctima alertaron a las unidades de Mecuc. Ortega y los demás capturados tenían a la víctima rodeada y atada de pies y manos. Según se conoció en ese momento, los tres detenidos habrían retenido a la persona en territorio venezolano y luego la habrían llevado a la casa.
Según la Policía, estando en territorio colombiano, el extranjero fue intimidado con arma de fuego y por su liberación exigían 10 millones de pesos. «Después del rescate, esta persona fue trasladada a un centro médico, con el fin de ser valorada por personal especializado, luego del examen médico, el joven interpuso la denuncia ante la autoridad competente», agregó en su momento una fuente judicial.
Por otra parte, las autoridades investigan si Ortega Sanabria formaba parte de una estructura dedicada a cometer «fleteos» y otros delitos, por lo que recientemente salió de prisión.