Cuidado con las app para dispositivos móviles que permiten espiar a otra persona sin su consentimiento

La mayoría de las veces, el stalkerware se instala accediendo físicamente a los dispositivos, por lo que el acoso siempre lo realiza alguien cercano a la víctima: el cónyuge, un familiar o la pareja sentimental.

En el mundo el uso de stalkerware se ha generalizado y lamentablemente está asociado con casos de violencia doméstica y maltrato psicológico de las víctimas, siendo en su mayoría mujeres.

La herramienta es un software que hace posible esta práctica, que a través de una app para dispositivos móviles permite espiar a otra persona sin su consentimiento.

Un estudio de Kaspersky llamado “Acoso Digital en las relaciones” muestra que 52% de los colombianos no sabe qué es el stalkerware y no tiene forma de reconocer si están siendo acosados digitalmente y por ende, ignoran cómo protegerse.

Justamente son las mujeres quienes tienen un mayor desconocimiento de la existencia de estas aplicaciones, pues entre los encuestados que afirmaron saber qué es el stalkerware hay más hombres (53%) que mujeres (42%). Otro dato importante es el número de personas que confirmaron haber sido o ser víctima de acoso digital. Entre los colombianos, el 30% de los encuestados dijo haber sido víctima de acoso digital; de ellos, 27% son hombres y 33% mujeres. Todas estas cifras permiten concluir que son ellas quienes están más expuestas a ser víctimas de violaciones a la intimidad.

El estudio también revela las formas más comunes de acoso digital, entre las que destacan, con el 50% de las respuestas, el monitoreo del teléfono móvil. Otras formas incluyen el uso de dispositivos de monitoreo especialmente diseñados (20%), programas instalados en computadoras (23%), espionaje de cámaras web (20%) y dispositivos domésticos inteligentes (12%). Es importante señalar que el 13% de las víctimas no pudo responder cómo se produjo el acoso, lo que demuestra el desconocimiento de la existencia de estas herramientas.

Carolina Mojica, gerente de producto para el consumidor para las regiones Norte y Sur de América Latina en Kaspersky, dijo que “la mayoría de las veces, el stalkerware se instala accediendo físicamente a los dispositivos, por lo que el acoso siempre lo realiza alguien cercano a la víctima: el cónyuge, un familiar o la pareja sentimental. La instalación se lleva a cabo discretamente y sin el conocimiento ni consentimiento de la víctima”.

Agregó que “tiene sentido que el teléfono móvil esté en la primera posición, pues la mayoría de las personas lo llevan consigo a todas partes, lo que facilita el rastreo de la ubicación junto con el acceso a información privada, como llamadas telefónicas, conversaciones a través de aplicaciones y correo electrónico”.

Judith Tapia, gerente de producto para el consumidor para México en la firma, dijo que “estas aplicaciones se pueden adquirir online. Son vendidas por compañías registradas de forma legal y se comercializan bajo la apariencia de, por ejemplo, soluciones para monitorear la actividad online de niños o empleados. Sin embargo, al contrario de las apps de control parental, el stalkerware se utiliza de manera sigilosa, sin que las víctimas sepan que sus dispositivos están siendo monitoreados”.

Agrega que “consideramos que el stalkerware no debe ser visto únicamente desde una perspectiva técnica, sino como una forma más de abuso, principalmente hacia las mujeres, pues está demostrado que el uso de este software está asociado a los casos de maltrato psicológico de las víctimas de violencia doméstica”.

Las parejas a menudo se dicen la contraseña de su teléfono inteligente y la encuesta lo confirma pues en Colombia 53% de las personas consultadas conocen la contraseña de su compañero y también han proporcionado la suya. Otro hábito digital preocupante, desde el punto de vista de la seguridad, es compartir servicios como iCloud y Google Account entre miembros de la misma familia.

El 35% de los colombianos lo hace y esta es otra opción tecnológica que permite rastrear a alguien, pues estos servicios incluyen características de ubicación geográfica, almacenamiento de fotos en la nube, entre otras herramientas que pueden ser explotadas.

Para comprobar si tu dispositivo móvil contiene stalkerware, busca las siguientes señales:

  • Verifica los permisos de las aplicaciones instaladas: el stalkerware puede disfrazarse bajo una app falsa con acceso sospechoso a los mensajes, registros de llamadas, localización y otras actividades personales. Por ejemplo, una aplicación llamada «Wi-Fi», con geolocalización, es un candidato sospechoso.
  • Analiza la configuración de «fuentes desconocidas» en los dispositivos Android. Si las «fuentes desconocidas» están activadas en el dispositivo, podría ser una señal de que se ha instalado un software no deseado por parte de un tercero.
  • Revisa el historial del navegador. Para descargar el stalkerware, el acosador tendrá que visitar algunas páginas web que el usuario afectado no conoce. También es posible que no haya ningún historial si el acosador lo ha borrado.

Si encontraste stalkerware en tu dispositivo:

  • No te apresures a desinstalarlo ya que el acosador lo sabrá y se debe considerar que esa persona puede ser un riesgo potencial para la seguridad en muchos casos.
  • Antes de eliminar el software, considera que conservar alguna evidencia del stalkerware para fines legales podría ser necesario.
  • Contacta a las autoridades locales y organizaciones que apoyan a las víctimas de la violencia doméstica, para que te ayuden y planifiquen tu seguridad. Puedes encontrar una lista de organizaciones relevantes en varios países en https://stopstalkerware.org/es/