El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, decretó estado de excepción en siete provincias del país luego de que se anunciara abruptamente la medida de eliminar el subsidio al diésel, lo que disparó el precio de este combustible de US$ 1,80 a US$ 2,80 por galón. La decisión busca contener las protestas y los bloqueos que ya se vivían en varias regiones.
Provincias afectadas y alcance del decreto
Las provincias en las que se aplica el estado de excepción son: Carchi, Imbabura, Pichincha, Azuay, Bolívar, Cotopaxi y Santo Domingo de los Tsáchilas.
El decreto otorga una vigencia de 60 días. Entre las medidas aplicadas están:
- Suspensión de la libertad de reunión en espacios públicos durante las 24 horas.
- Autorización para que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional actúen para impedir reuniones o bloqueos que representen riesgos para la seguridad pública.
- Restricciones al libre tránsito en vías principales donde se han producido bloqueos.
Motivos, reacciones y consecuencias
El retiro del subsidio al diésel respondía a un gasto estatal estimado en US$ 1.100 millones al año, recursos que el gobierno pretende redirigir hacia programas sociales, asistencia al transporte, apoyo a agricultores, y otros proyectos productivos.
Los gremios del transporte, pequeños productores y comunidades afectadas han reaccionado con protestas y bloqueos en carreteras. En varias provincias se reportaron vías interrumpidas, barricadas, y tensión creciente. El gobierno ha abierto mesas de diálogo, aunque ha sido enfático en que la eliminación del subsidio no se revertirá