Armando Novoa, jefe negociador.

En un acto político y técnico que marcó el cierre del sexto ciclo de la Mesa de Diálogos entre el Gobierno de Colombia y la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (CNEB), ambas delegaciones suscribieron el Acuerdo Marco sobre Zonas para la Capacitación Integral y Ubicación Temporal (ZUT-ZOCIUT).

El compromiso establece la implementación piloto de dos zonas temporales en los municipios de Roberto Payán (Nariño) y Valle del Guamuez (Putumayo), donde permanecerán inicialmente por diez meses con protocolos definidos de seguridad, monitoreo y verificación.

Protocolos

El acuerdo habilita un paquete de pasos concretos para avanzar en la consolidación del proceso: la ruta gradual de desuso, entrega y destrucción de armas; el diseño de procesos de reintegración social, política y económica; y la aplicación de protocolos en logística, seguridad, monitoreo y pedagogía que regirán la implementación en terreno.

Armando Novoa, jefe negociador del Gobierno, confirmó el alcance de la decisión: “Se concretará la creación de las zonas de ubicación temporal. A esas zonas irán 200 integrantes de la Coordinadora, 100 en Nariño y 100 en Putumayo”. La Delegación del Gobierno también informó que, como aporte directo a la seguridad regional, la CNEB se comprometió a la destrucción adicional de 5,5 toneladas de material explosivo.

Relación

Desde el Gobierno Departamental se destacó la estrecha relación entre los acuerdos y las transformaciones profundas que demandan los territorios.

El respaldo territorial también quedó en evidencia. Walter Mendoza, delegado de la CNEB, subrayó que la destrucción de explosivos constituye un paso clave para la tranquilidad de las comunidades. Por su parte, Liber Moreano, gobernador indígena, llamó a garantizar inversión social sostenida para que la paz sea duradera desde la base comunitaria.

El Acuerdo Marco incorpora mecanismos técnicos y jurídicos, protocolos de funcionamiento, seguridad, desarme, monitoreo y pedagogía, así como medidas de protección para comunidades y ambiente. También articula programas productivos orientados a la sustitución de economías ilegales y rutas de integración para quienes ingresen al proceso de tránsito hacia la ciudadanía plena.

Además, Gobierno y CNEB pactaron protocolos para la destrucción de armas y la conformación de listados de representantes que operarán dentro de las ZUT-ZOCIUT. Con este paso concluye la fase normativa y se abre el camino a la ejecución técnica en territorio, con el reto de que la articulación institucional se traduzca en transformaciones reales para las comunidades de Nariño y Putumayo.