‘El Rincón de la lectura’: Un espacio para migrantes venezolanos

La crisis de migración venezolana ha estado acompañada con el retorno de colombianos al país, este contexto ha implicado dificultades de inclusión y empleo para diversas familias que buscan establecerse en ciudades como Bogotá.

En respuesta a esa situación, el proyecto Esperanza Sin Fronteras con el apoyo de la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los Estados Unidos (PRM), inauguró un espacio que logró beneficiar a 58 migrantes venezolanos y retornados colombianos.

Por esto, la primera jornada se realizó en el peaje de Chusacá, Cundinamarca donde se inauguró el Rincón de la Lectura; un espacio con el que se busca promover la lectura, la expresión artística de los niños, niñas y adolescentes que transitan por las carreteras.

En esta ocasión, la niñez migrante creó el mural “Ven Esperanza”: una expresión que representa el tránsito y la migración desde la mirada de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes.

A su vez, estos espacios buscan que los niños, niñas, adolescentes y jóvenes puedan comprender sus derechos e identificar factores de riesgo que les permitan estar más seguros.

La segunda jornada se realizó en la localidad de Kennedy, Bogotá y tuvo el nombre de “Feria de Servicios” impulsada por la Cancillería Colombiana y contó con el apoyado de distintas organizaciones de carácter privado y público. En este espacio se buscó acercar diferentes entidades territoriales con un sector de la población que requiere mayor acceso a información y atención.

Ayudas de World Vision a los migrantes

World Vision acompañó este espacio mediante sus Espacios Amigables para la Niñez donde se impulsaron actividades lúdico-recreativas que les permitieron a los niños, niñas, jóvenes y adolescentes reconocer y expresar sus emociones, comprender sus derechos y alzar su voz ante cualquier situación que los y las vulnere.

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En estas jornadas, los colombianos retornados y migrantes participaron de una jornada integral que les permitió acceder a: orientación y apoyo en solicitud de asilos, fortalecimiento a organizaciones sociales, clínica jurídica para migrantes, rehabilitación para personas con discapacidad, participación en programas de emprendimiento, inclusión laboral, atención en salud, orientación sobre la Ley de Colombianos retornados y capacitación en derechos humanos.

Además, estas acciones, se desarrollaron en el marco del proyecto Esperanza Sin Frontera próximo a cumplir su primer año de implementación en las rutas de Tona, Bucaramanga, Tunja, Bogotá, Ibagué, Cajamarca, Cali, Popayán e Ipiales con asistencia humanitaria enfocada en la protección y albergue de la población migrante proveniente de Venezuela.