Escándalo salpica al comandante del Ejército de Colombia, general Luis Mauricio Ospina, «por celos»ordenó investigar a Leonardo Colmenares, profesor de inglés de su esposa. La Revista Semana informó que a «Leonardo Colmenares, le montaron un expediente falso y le hicieron seguimientos ilegales»
La Procuraduría General de la Nación y la Fiscalía investigarán los hechos denunciados , por ordenar investigar al profesor de ingles de la esposa del general.
«Apertura de investigación disciplinaria al comandante del Ejército, el general Luis Mauricio Ospina, quien, al parecer, habría ordenado seguimientos e interceptaciones ilegales, al profesor de inglés de su esposa»
Por su parte la Fiscalía dijo: «Se reafirma el compromiso de investigar cualquier actuación en la que se use la inteligencia del Estado para beneficio personal, en menoscabo de las garantías constitucionales y del debido proceso que les asisten a los ciudadanos”.
Según Semana el General afirmó «reconozco que pedí que verificaran a una persona que decía en el Cantón Norte ser profesor de inglés (…) sí, él estuvo dándole algunas clases a mi señora”.
Además manifestó que la decisión final es de los subalternos: «Son los que determinan qué hacen, si hacen seguimientos o qué tarea de inteligencia realizan».
El general Ospina advirtió que “no es que yo esté haciendo mal uso del aparato de inteligencia”
Ejército tras escándalo del General de Ospina
Se habría ordenado «investigar ilegalmente al profesor de inglés de su esposa» y al parecer el estaría sospechando un tema de infidelidad. El Comando reaccionó a las acusaciones.
“Las misiones de Inteligencia y Contrainteligencia son diferentes; están claramente consignadas en la Ley Estatutaria 1621 de 2013″
Agregó el comunicado «En el caso específico de la función de Contrainteligencia, las actividades buscan anticipar, prevenir, detectar y neutralizar acciones para proteger al personal, las instalaciones, el material y la información”.
Un grupo de tres integrantes de inteligencia y contrainteligencia estaba encargados de investigar sus encuentros con Lorena Ospina, esposa del general Ospina.
El alto funcionario dio la orden a la Unidad Militar de Contrainteligencia, ante «una posible vulneración de la seguridad e integridad del Comandante y su núcleo familiar».
Te interesa: Shakira así reacciono al ver a su imitación de ‘Yo me llamo’: «Es mejor que la original
En el Día de la #InteligenciaMilitar, exaltamos el trabajo de los hombres y mujeres que integran esta Arma. Desde su profesionalismo, contribuyen al cumplimiento de la misión, especialmente, en la protección de la vida y bienestar de las comunidades
— General Luis Mauricio Ospina Gutiérrez (@COMANDANTE_EJC) November 2, 2023
¡En guardia por la patria! pic.twitter.com/bM4RQQhAgU
Qué dijo el profesor de Inglés:
Colmenares afirmó a la revista “Me querían desaparecer (…) o me iban a matar”. El profesor y a quién estarían involucrándolo con la esposa del general narró el infierno que le tocó vivir por cuenta de un montaje que hizo la inteligencia del Ejercito.
Al ‘Teacher’ como le dice a Colmenares y quién prestaba sus servicios en traducción de documentos de inteligencia también impartía clases a esposa de otros oficiales.
«Usaron la más avanzada tecnología de las Fuerzas Militares para ubicarlo mediante el rastreo de su teléfono celular», dijo Semana.
Lo que hoy en día está en tela de juicio es que el General usó recursos público para beneficios personales y en este caso para beneficios personales.
Tal como pasó con el prueba del polígrafo que se realizó a Marelybys Meza, exniñera de Laura Sarabia, quién era una de las principales sospechosas del robo de una maleta con dinero de la casa de la funcionaria y mano derecha de Gustavo Petro.
Existen en poder de la Revista Semana » audios e imágenes que prueban los seguimientos ilegales al profesor de inglés»
Colmenares manifestó que siempre veía «genta rara alrededor mío, siguiéndome de día y de noche, y sin saber por qué”.
Semana aportó las pruebas y audios.
Te interesa: Orlando Liñan, doble de Diomedes Díaz, se separó de Tita Contreras: «Me engañó»