La organización Gemini Untwined, en Londres, ayudó a llevar a cabo el procedimiento y que fue calificad la describió como la separación más desafiante.
Histórico. Niños siameses brasileños unidos por la cabeza fueron separados en una intervención y la novedad es que lo hicieron usando realidad virtual, según AFP.
Arthur y Bernardo Lima nacieron en 2018 en el estado de Roraima, en el norte de Brasil, como gemelos craneópagos, una condición extremadamente rara por la que los hermanos están fusionados en el cráneo.
En una cirugía maratónica que duró 23 horas, los niños unidos en la parte superior de la cabeza por cuatro años y ahora gracias a este procedimiento pueden mirarse ahora a la cara por primera vez.
Este hecho se logró gracias a la organización benéfica médica Gemini Untwined, con sede en Londres, que ayudó a llevar a cabo el procedimiento, la describió como «la separación más desafiante y compleja hasta la fecha», dado que los niños compartían varias venas vitales.
«Los gemelos tenían la versión más grave y difícil de la afección, con el mayor riesgo de muerte para ambos», dijo el neurocirujano Gabriel Mufarrej, del Instituto Estatal del Cerebro Paulo Niemeyer en Río.
Agregó «Estamos muy satisfechos con el resultado».
Fueron unos 100 profesionales, se prepararon para las delicadas etapas finales de la cirugía el 7 y 9 de junio con la ayuda de realidad virtual, dijo Gemini Untwined.
Procedimiento:
Se usó escáneres cerebrales para crear un mapa digital del cráneo compartido de los niños, los cirujanos se entrenaron conjuntamente en Rio y Londres con una cirugía de prueba realizada con realidad virtual.
El neurocirujano británico, Noor ul Owase Jeelani, cirujano principal de Gemini Untwined, definió la sesión de preparación en realidad virtual como «cosas de la era espacial».
«Es simplemente maravilloso, es genial ver la anatomía y hacer la cirugía antes de poner a los niños en riesgo», dijo a la agencia de noticias británica PA.
Imágenes y videos publicados por el personal médico mostraron a los niños acostados uno al lado del otro en una cama de hospital después de la cirugía, con el pequeño Arthur extendiendo la mano para tocar la mano de su hermano.
Entre lágrimas, la madre de los niños, Adriely Lima, describió el alivio de la familia.
«Hemos estado viviendo en el hospital durante casi cuatro años», apuntó.