Momentos de sorpresa y preocupación vivió una familia cuando, al ingresar al baño de su vivienda, encontró a una enorme serpiente pitón que pesaba aproximadamente 60 kilos. El reptil, que había ingresado por un punto aún no identificado, se encontraba enrollado cerca del sanitario.
De inmediato, los habitantes del inmueble llamaron a los organismos de emergencia, quienes enviaron un equipo especializado en manejo de fauna silvestre. Tras una intervención cuidadosa, la pitón fue asegurada sin causar daños a nadie y posteriormente trasladada a un centro autorizado para su valoración y reubicación.
Las autoridades recordaron la importancia de reportar este tipo de hallazgos y evitar intentar manipular animales de gran tamaño, pues su control debe realizarse exclusivamente por personal experto.