El ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, presentó ante el Consejo de Ministros un balance detallado de los avances logrados en materia de transición energética durante los primeros tres años del gobierno del presidente Gustavo Petro. Según el funcionario, estos avances ya están produciendo impactos visibles en la economía popular, las comunidades rurales y los territorios históricamente excluidos del sistema eléctrico nacional.
1. Impulso a la energía solar en la economía popular
Uno de los resultados más destacados es el uso de energía solar en tiendas de barrio, un modelo que ha permitido disminuir significativamente los costos de electricidad de pequeños comerciantes, en especial en la región Caribe.
- Más de 2.000 tiendas están en proceso de instalar paneles solares.
- Más de 100 tiendas, principalmente del Caribe, ya funcionan con estos sistemas.
- Los tenderos han logrado reducir hasta en un 70 % sus facturas de energía.
Este ahorro ha tenido efectos directos en la vida cotidiana: aumento del inventario, ampliación de negocios, mejoras en las viviendas y beneficios familiares, como la posibilidad de cambiar a los hijos de colegio. El ministro recordó que este modelo fue destacado por Petro en su balance de Gobierno de 2024.
2. Aceleración de la generación limpia
El Gobierno reportó un crecimiento notable de la energía renovable, especialmente en zonas rurales no interconectadas.
Soluciones fotovoltaicas individuales
- Pasaron de 0,0081 megavatios (2023) a 15,16 megavatios (2025).
- Estas instalaciones llevaron energía a más de 17.000 habitantes rurales por primera vez.
Capacidad limpia instalada mediante FENOGE
- Se añadieron 17 megavatios adicionales de energía renovable.
- Se beneficiaron 193.018 usuarios en distintos territorios.
- Se fortaleció el desarrollo de comunidades energéticas, impulsando la participación directa de ciudadanos en la producción y administración de energía.
3. Uso de regalías para la transición energética
El Ministerio modificó normas claves para que 209 municipios estén obligados a diseñar y presentar proyectos de energías renovables financiados con regalías.
La meta es transformar rentas provenientes del sector fósil (petróleo, gas y minería) en inversión en energías limpias, acelerando la transición en regiones con rezagos energéticos.
4. La energía como un derecho humano fundamental
En el marco del Día de los Derechos Humanos, Palma defendió la propuesta del Gobierno de reconocer la energía como un derecho fundamental, enfatizando que:
- No se trata de una politización del tema, sino de una necesidad social.
- Se busca que comunidades y organizaciones dejen de ser solo usuarios pasivos y pasen a ser actores dentro del sistema energético, capaces de producir, administrar y gestionar su propia energía.
5. Expansión de las comunidades energéticas
El ministro detalló que la matriz de energías limpias del país pasó de 200 megavatios a cerca de 3,5 gigavatios, multiplicándose por siete en tres años.
Además, se han implementado iniciativas comunitarias en sectores estratégicos:
- 25 comunidades energéticas en centros de salud, beneficiando a más de 365.000 usuarios.
- 152 comunidades energéticas en instituciones educativas, especialmente en zonas no interconectadas, con planes de expansión hacia más escuelas rurales.
Conclusión General
El informe del ministro Edwin Palma evidencia un avance acelerado de la transición energética en Colombia, con un enfoque social que prioriza comunidades rurales, tenderos, instituciones educativas y centros de salud.
El Gobierno subraya que la energía debe concebirse como un derecho fundamental y no como un privilegio, y que la participación comunitaria es clave para transformar el sistema energético nacional.
La combinación de nuevas capacidades renovables, reformas regulatorias, proyectos financiados con regalías y expansión de comunidades energéticas posiciona al país en un camino de transición sostenida, con efectos directos sobre la calidad de vida y el desarrollo territorial.
