El Gobierno de Hong Kong anunció la creación de una comisión independiente que investigará a fondo el mortífero incendio ocurrido en el complejo residencial Wang Fuk Court, en el distrito de Tai Po, uno de los peores desastres urbanos registrados recientemente en la región.

El fuego, ocurrido el 26 de noviembre, dejó más de un centenar de fallecidos, miles de personas evacuadas y un intenso debate público sobre el estado de los edificios, la supervisión de obras y la capacidad de respuesta de los servicios de emergencia.

Una investigación exhaustiva

La comisión estará encabezada por el juez David Lok Kai-hong, acompañado por expertos designados por el Ejecutivo. Su labor se extenderá durante nueve meses, periodo en el que deberán reconstruir la cadena de acontecimientos que permitió la rápida propagación del incendio y determinar si existieron fallas estructurales, omisiones regulatorias o responsabilidades administrativas.

Entre los puntos clave de la investigación se incluyen:

  • Las causas técnicas que originaron el fuego y los factores que aceleraron su expansión.
  • La actuación de los servicios de emergencia, incluidos los tiempos de respuesta y los protocolos aplicados.
  • La supervisión de remodelaciones realizadas en el edificio y el cumplimiento de las normativas de seguridad.
  • La posible existencia de negligencia, mala praxis o irregularidades vinculadas a contratistas, administradores del edificio o funcionarios públicos.

Objetivo: evitar otra tragedia

La comisión comenzará a trabajar formalmente a finales de diciembre y entregará su informe final al jefe del Ejecutivo de Hong Kong, acompañado de recomendaciones para mejorar las políticas de seguridad, reforzar las inspecciones de edificios y actualizar los protocolos de emergencia.

El Gobierno ha afirmado que el informe será hecho público, salvo las partes que pudieran interferir con investigaciones penales en curso. Paralelamente, las autoridades continúan con indagaciones criminales relacionadas con las obras de remodelación del complejo, que ya han derivado en varios arrestos.

La tragedia de Tai Po ha generado una fuerte demanda social de transparencia y reformas, y la nueva comisión se perfila como un paso crucial para esclarecer responsabilidades y elevar los estándares de seguridad en la ciudad.