La NASA confirmó la detección de compuestos orgánicos complejos en los chorros de vapor que emergen del polo sur de Encélado, una de las lunas más pequeñas de Saturno. Los científicos aseguran que podría existir un océano subterráneo con condiciones similares a las de la Tierra primitiva, aumentando las posibilidades de vida microbiana fuera de nuestro planeta.
