MiLAB -Laboratorio Govtech y de Impacto Público-, operado por iNNpulsa Colombia, lideró el programa Conecta tu solución – Govtech. A través de la iniciativa, solucionadores del sector emprendedor y empresarial del país presentaron sus propuestas a dos retos de impacto público de la agenda ambiental y sostenible del país.
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Como resultado del programa, fueron seleccionados e implementados los pilotos propuestos por las empresas colombianas Control Ambiental, dedicada a la gestión integral de residuos orgánicos y AZLOGICA, líderes en desarrollo de soluciones de Internet de las Cosas (IoT).
“A través de MiLAB conectamos los desafíos del sector público con el ecosistema emprendedor, empresarial y académico, que pueda brindar las soluciones efectivas a sus retos. Este ejercicio de Conecta tu solución – Govtech, nos sigue demostrando el potencial del talento de los solucionadores en el país y, por ello, continuaremos promoviendo estas conexiones”, expresó Hernán Ceballos, gerente general de iNNpulsa Colombia.
¿En qué consistían los retos y las soluciones elegidas?
El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y PorkColombia buscaban una solución para la fabricación de fertilizantes a base de porcinaza sólida. El propósito: fomentar el aprovechamiento de este elemento residual del sector porcicultor -del cual se producen 9,3 millones de litros diarios-, el consumo de insumos agrícolas orgánicos y la apertura a una línea de negocio diferente de la porcicultura, que cumpla con los estándares de la Resolución 150 de 2003.
El piloto de la empresa Control Ambiental de Colombia se centró en procesar los residuos orgánicos de porcinaza de la Porcícola Líder de Colombia SAS, previamente deshidratados, controlando el proceso para obtener un producto sanitizado y estabilizado con baja pérdida de nutrientes y bajas emisiones de gases de efecto invernadero. Entre los resultados del piloto se evidenció una reducción del 50% en el costo de producción del biofertilizante.
De acuerdo con Diego Fermín Cárdenas, director de proyectos de Control Ambiental de Colombia, los resultados de este ejercicio fueron positivos. “Realizamos el proyecto de aireación forzada con cerca de 4.5 toneladas de material. Tras el proceso logramos cifras destacables como reducción del trabajo manual en más del 60%, 25% menos de emisiones de CO2, así como un abono de alta calidad e higienizado”, explicó el experto.
De esta solución de impacto público se destaca que puede replicarse en otras actividades agroindustriales como la avicultura o el sector de producción de la palma aceitera y, tras el proyecto piloto, se demostró que es posible producir abonos con procesos menos contaminantes, más limpios y con menor uso de mano de obra, la cual puede aprovecharse en otras labores.
Por su parte, Ingeniería Servicios y Desarrollos SAS (ISD) y el Tecnoparque SENA, Nodo Bogotá, a través de su reto, buscaban tecnologías que permitieran monitorear en campo la efectividad de un biofertilizante con alto potencial de mejorar los resultados de diferentes cultivos en Colombia.
Para esto, AZLOGICA puso en marcha un piloto de impacto público centrado en la creación de un modelo algorítmico de procesamiento de imágenes que fuese capaz de medir las variaciones físicas de la planta de lechuga, como el área verde de la planta y el tamaño del tallo y/o raíz, y así valorar la efectividad del bioinsumo.
“Nuestra solución utiliza inteligencia artificial para realizar el aprendizaje autónomo de un algoritmo. A partir de datos básicos y fotografías de la planta, se identifican variables físicas como color, forma y tamaño. De manera remota, se realiza un análisis de dichas variables que permite la toma decisiones apropiadas para un crecimiento más efectivo de la planta,” comentó Laura Sáenz, ingeniera de investigación y desarrollo en AZLOGICA.
A través de la tecnología propuesta por el solucionador, se logró optimizar el monitoreo de la evolución de los cultivos de manera remota y, a partir de esta evidencia, ISD busca incorporar la solución de monitoreo remoto a su propuesta de valor para que los productores agrícolas cuenten con una solución integral que incorpore el bioinsumo y el monitoreo al cultivo.
Los dos pilotos fueron ejecutados en paralelo y de forma intensiva, concluyendo en resultados significativos para el desarrollo sostenible del país.