Gina Marcela Castaño Medina conducía con su familia cuando fue interceptada por una motocicleta, de la que se bajó un hombre que, sin mediar palabra, procedió a dispararle en múltiples ocasiones.
Según los testigos, el incidente tuvo lugar alrededor de las 9:10 de la noche. Las versiones coinciden en que el objetivo era la mujer, la motocicleta estaba siguiendo la zona y al detectar el vehículo, se dirigieron directamente hacia ella.
Gina recibió múltiples impactos en la cabeza. Ella conducía un vehículo de color rojo en el que también viajaban sus dos hijos, ambos menores de edad, y su esposo, quien quedó paralizado por el sonido de las denotaciones.
La Policía del departamento del Quindío, donde ocurrieron los hechos, aseguró que el vehículo era rojo y que la agente de tránsito fue reconocida por su labor ejemplar entre sus compañeros.
Durante este fin de semana, las autoridades locales decidieron realizar varios actos conmemorativos en Calarcá, con el propósito de sensibilizar a los habitantes y que aparezcan los responsables de cometer el brutal crimen.
Por otro lado, las autoridades están analizando las cámaras de seguridad de la zona donde se produjo este atentado, en la carretera que une los barrios La Floresta y El Porvenir, para determinar la dirección que tomaron los asesinos.
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