Los índígenas liderados por Leonidas Iza siguen con las manifestaciones mientra el presidente calificó como un acto repudiable el taque a un convoy militar.
Ya se cumplen más de 17 días de protestas en el Ecuador y no se vislumbra una salida a la grave crisis social derivada por la protesta indígenas en contra del gobierno de Guillermo Lasso contra el alza del precio de los combustibles.
Lasso quien se salvó de la destitución y se queda en el poder, en una nueva alocución presidencial manifestó que no se volverá a sentar a la mesa con los representantes de Leonidas Iza, presidente del Conaie.
«No vamos a negociar con quienes mantienen a Ecuador como rehén», declaró el mandatario de derecha en una alocución presidencial.
La tensión se mantiene y las protestas también mientras sigue el desavastecimiento sigue aumentando especialmente en el tema de medicamentos.
Todo esto luego que los manifestantes atacarán con «lanzas y armas de fuego» en la Amazonía un convoy con combustible y que era protegido por militares.
«Es un acto criminal jugar con la vida de inocentes. El país ha sido testigo de todos los esfuerzos que hemos hecho para entablar un diálogo fructífero y sincero», añadió Lasso.
El elevado costo de vida alimentado por el incremento de precios de combustibles empujó a las calles a unos 14.000 manifestantes, la mayoría en Quito. Exigen medidas que amortigüen el golpe económico en la producción agrícola y la canasta básica.
Agregó «Fue un ataque brutal (…) Pero ¿cómo podemos saber que si realmente salió o no salió de los manifestantes?, se preguntó Iza en la mañana durante la frustrada reunión».
Lasso en su intervención manifestó «Que el mundo sepa quién no tiene voluntad para resolver los problemas».
Mientras en la Asamblea del país se debatía la posible destitución de Lasso que no prosperó. Se requerían de 92 votos y se alcanzaron en un inicio 81 votos a favor, 42 en contra, 12 abstenciones y cero en blanco.
Wilma Andrade (ID) pidió la rectificación de la votación porque adujo que ocurrió un problema en su curul y votó a favor, cuando su intención era votar en contra de la destitución.
En la nueva votación se obtuvieron 84 votos afirmativos, 42 negativos, 11 abstenciones y cero en blanco.
Acosado también por un debate de destitución en curso en el Congreso, el mandatario de derecha cede a cuentagotas ante los reclamos de los manifestantes.
Sin tomar en cuenta el reciente reporte del Ejército, las protestas dejan cinco manifestantes muertos, más de 500 heridos entre uniformados y civiles, y unos 150 detenidos, según diversas fuentes.
Los indígenas denuncian represión policial en medio de las manifestaciones.