El pánico se apoderó de jugadores y público que asistió a un partido de fútbol americano de una escuela secundaria y que enfrentó a Whitmer, de Toledo, Ohio, ante Central Catholic, en Estados Unidos.
Cuando faltaban siete minutos para el final, se escucharon más de 10 disparos. Un tiroteo se había desatado en las afueras del estadio de Whitmer High. El ruido de los disparos provocó que los aficionados empezaran a correr por las gradas. Los jugadores también salieron a la carrera del campo.
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Las primeras informaciones señalan que la policía logró detener a dos de los cuatro sospechosos. Las tres víctimas, una mujer y dos hombres, sufrieron heridas leves y fueron atendidos en centros hospitalarios.
«Estimadas familias locales de Washington, un acto de violencia ocurrió a fuera del estadio en el partido de football de esta noche entre Central Catholic y Whitmer. En este momento, sabemos que dispararon a tres personas, incluidos dos adultos y un estudiante de Whitmer, y fueron trasladados a un local hospital para recibir tratamiento por sus lesiones», informó Kadee Anstadt, superintendente de escuelas locales.
«Ningún espectador resultó herido en la evacuación, y no podríamos estar más orgullosos de nuestros estudiantes, personal, aficionados de Whitmer y nuestros invitados de Central Catholic. Se aplicó la política de Whitmer Athletic de examinar y examinar a todos los invitados, y el plan de seguridad preestablecido de WLS se inició de inmediato. Actualizaremos a medida que haya más información disponible», prosiguió Kadee Anstadt.
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El partido de fútbol americano estaba siendo transmitido por una cadena local. Se trata del deporte rey en Estados Unidos e incluso los partidos entre institutos despiertan una gran expectación. El partido quedó suspendido tras el tiroteo.
