el buñuelo o la natillael buñuelo o la natilla

Con la llegada de diciembre y las tradicionales novenas, una pregunta vuelve a aparecer en las conversaciones familiares: ¿qué engorda más, el buñuelo o la natilla? Aunque ambos alimentos son protagonistas de la gastronomía navideña colombiana, los nutricionistas coinciden en que existe una diferencia marcada en su aporte calórico.

El buñuelo, el más calórico de la temporada

El buñuelo, preparado a base de harina, queso y sal, pasa por un proceso de fritura que incrementa significativamente su contenido de grasa. Según especialistas en salud nutricional, un buñuelo mediano puede contener entre 180 y 250 calorías, dependiendo de su tamaño y del aceite absorbido durante la cocción.

“El hecho de que sea un producto frito lo convierte en un alimento más calórico y con mayor densidad energética”, explican los expertos. Este tipo de preparación aumenta su aporte de grasas saturadas, lo que lo hace menos recomendable para un consumo frecuente.

La natilla, dulce pero menos calórica

Por su parte, la natilla —el postre insignia de diciembre—, aunque contiene azúcar, leche y almidones, no pasa por procesos de fritura. Una porción estándar, equivalente a media taza, aporta entre 120 y 160 calorías en promedio.
Los nutricionistas señalan que, en comparación con el buñuelo, la natilla “tiene un contenido calórico más moderado, especialmente si se prepara con menos azúcar o con leche baja en grasa”.

Consumo responsable en temporada decembrina

Aunque la balanza favorece a la natilla como la opción menos calórica, los expertos recomiendan disfrutar ambos alimentos con moderación y complementar su ingesta con actividad física regular.
“Las festividades no tienen por qué ser restrictivas, pero sí es importante mantener el equilibrio. Una alimentación consciente permite disfrutar de los sabores tradicionales sin afectar la salud”, añaden.

Tradición y moderación

Buñuelos y natilla seguirán siendo protagonistas en los hogares colombianos durante todo diciembre. La clave está en la cantidad y la frecuencia.
Mientras tanto, la pregunta continúa siendo parte del encanto de la temporada, un recordatorio de que la tradición y la salud deben ir siempre de la mano.