En un operativo coordinado entre la Policía Nacional y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), 17 menores de edad fueron puestos bajo protección estatal en zona rural de Yarumal, Antioquia, luego de que las autoridades identificaran que permanecían dentro de una comunidad de prácticas religiosas estrictas que podría estar afectando sus derechos fundamentales.

El procedimiento se llevó a cabo tras una investigación que alertó sobre posibles restricciones a la educación, la movilidad y el contacto con el exterior. Los menores fueron trasladados a lugares seguros donde recibirán acompañamiento psicológico, social y jurídico, mientras se avanza en la verificación de su situación individual y familiar.

Las autoridades señalaron que la intervención no tiene como objetivo cuestionar convicciones religiosas, sino garantizar que ningún niño, niña o adolescente esté expuesto a entornos que vulneren su bienestar o desarrollo integral.

El ICBF continuará el proceso de restablecimiento de derechos y definirá, caso por caso, las medidas de protección necesarias