Serbia solicitará a la fuerza internacional KFOR de la OTAN que le permita desplegar sus tropas militares y policiales en Kosovo y Metohija, declaró el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
«Enviaremos una solicitud al jefe de la KFOR para que garantice el despliegue de un contingente del Ejército y la Policía de Serbia en el territorio de Kosovo y Metohija», dijo Vucic en su mensaje a la nación.
El mandatario agregó que el Gobierno decidirá oficialmente sobre el envío de dicha solicitud el lunes 12 de diciembre.
El director de la Oficina para Kosovo y Metohija del Gobierno serbio, Petar Petkovic, afirmó que Belgrado estudiará el redespliegue de hasta mil agentes de seguridad en el norte de Kosovo debido a las acciones ilegales de Pristina.
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Según Petkovic, entre 300 y 350 policías kosovares, entre ellos miembros de una unidad de operaciones especiales con armas automáticas, ingresaron en el norte de Kosovo.
Aprobada en 1999, la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU prevé la posibilidad de autorizar el regreso a Kosovo de un número acordado de elementos militares y policiales para llevar a cabo determinadas funciones.
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La decisión de este solicitud se conocerá el 12 de diciembre, luego que los residentes serbios de la región de Kosovo y Metojia han levantado barricadas en el norte de la región para impedir que la policía kosovar se lleve a Pristina a sus connacionales detenidos por atacar a los agentes de seguridad.
Todo esto en protesta por la detención del expolicía Dejan Pantic, según lo informó el diario de Vecernje Novosti y es que el expolicía fue detenido con otros miembros de etnia serbia que trabajaban como agentes de la ley en Kosovo.
Serbia y Kosovo mantienen tensiones históricas desde la disolución de Yugoslavia.