Los taxis eléctricos ofrecen una solución efectiva al no emitir gases contaminantes ni partículas nocivas en ciudades colombianas como Bogotá y Medellín, donde la contaminación del aire es un problema crítico y los niveles de material particulado oscilan entre 2.5 y 10 micrómetros.
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Así mismo, puesto que los precios de los combustibles fósiles en Colombia son volátiles, la electricidad para vehículos es más estable y generalmente más económica.
Fredy Rodríguez, líder de transición energética del Grupo Carrera, aseveró, que “esto se traduce en ahorros significativos en los costos operativos para los propietarios de taxis”.
Diferencias de taxis
Según un estudio comparativo realizado por Taxis Libres entre un modelo de gasolina KIA Picanto modelo 2025 y un modelo eléctrico NAT revela algunas diferencias de costo.
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El eléctrico NAT invierte $44,500 para recorrer 400 km, considerando un costo de $890 por kWh para 50 Kw de capacidad; mientras, el KIA Picanto modelo 2025 a gasolina de 1.000 cm3: Invierte $127,200 para recorrer 400 km, basándose en el uso de 8 galones de gasolina a $15,900 cada uno.
Según Rodríguez, el ahorro significativo de $82,700 en este ejemplo es solo uno de los muchos beneficios asociados con la transición a vehículos eléctricos.
Rodríguez resalta otros aspectos positivos como reducción drástica de emisiones contaminantes, pues los vehículos eléctricos no emiten gases de efecto invernadero ni partículas contaminantes, mejorando significativamente la calidad del aire en las ciudades.
Silencio y precios
Además, son mucho más silenciosos que los vehículos de combustión interna, lo que mejora la calidad de vida en áreas urbana; se fomenta el desarrollo de energías renovables y diversifica el suministro energético.
También destaca que en el mercado colombiano un taxi eléctrico NAT se encuentra por un valor comercial de $99.900.000 mientras que un taxi KIA Picanto modelo 2025 de 1.000 cm3 se comercializa en $125.000.000.
Igualmente, explicó que la gente por desconocimiento piensa que los carros eléctricos se incendian más, lo cual es erróneo. Los carros a gasolina tienen más probabilidades de conflagración, tanto así que hasta tienen que portar un extintor. Cabe destacar que todas las baterías que usan los vehículos eléctricos, tiene un complejo sistema de refrigeración con líquidos herméticamente sellados para controlar el ambiente en el cual trabajan.
Sobre los desafíos
Por otra parte, Rodríguez dijo que uno de los principales desafíos es la resistencia al cambio entre inversionistas y conductores, quienes a menudo son escépticos ante nuevas tecnologías.
Dijo además que “estamos trabajando para despejar mitos y desinformación, y para acercar a los clientes a productos adecuados para el servicio público, destacando su autonomía y durabilidad. Nuestro objetivo es informar y educar para reducir la resistencia al cambio, mostrando las ventajas ecológicas y económicas de la movilidad eléctrica”, añadió.