El Gobierno de Nicaragua negó la solicitud de extradición presentada por Colombia para lograr el regreso de Carlos Ramón González, exdirector del DAPRE, implicado en el escándalo de corrupción de la UNGRD y prófugo de la justicia.
La Cancillería colombiana fue notificada oficialmente de la decisión de la administración de Daniel Ortega, que además informó la concesión de asilo político al exfuncionario.
Argumentos de Nicaragua
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua afirmó que González tiene derecho a solicitar protección internacional por considerar que enfrenta persecución política.
El texto subraya que ninguna persona puede ser expulsada o enviada a un país donde su vida o su libertad corran riesgo por motivos de “raza, nacionalidad, religión, condición social o posturas políticas”.
Antecedentes de la petición
La solicitud de extradición había sido tramitada por la Embajada de Colombia en Managua el pasado 16 de agosto, a instancias del presidente Gustavo Petro. Sin embargo, semanas antes, el 21 de mayo, esa misma delegación había solicitado residencia para el exfuncionario, petición que levantó críticas en la opinión pública.
El presidente Petro, al ser consultado sobre el tema, aseguró que se enteró por la prensa de esa gestión y recalcó que su gobierno no actúa para proteger “amigotes”.