Paulina Gutiérrez Romero, de 23 años, fue víctima de una agresión física y verbal presuntamente perpetrada por una vecina. Según las autoridades, la agresora la atacó con puños y un objeto contundente, identificado como un palo, provocando múltiples lesiones en distintas partes del cuerpo.
Al ingresar al centro de salud, Paulina presentaba contusiones visibles en la cara, especialmente en la nariz y en la mano derecha, además de arañazos en el pómulo derecho y en la frente. Aunque las lesiones no representaban un riesgo vital, la atención médica fue inmediata para controlar el dolor y evaluar el alcance de las contusiones.
Se presume que la agresión surgió en el marco de un conflicto social o una disputa personal que escaló de manera violenta. Los detalles exactos aún no han sido confirmados, y la identidad de la presunta agresora no ha sido revelada. La Policía y los entes de control han iniciado la investigación correspondiente, pero no se han registrado capturas ni avances significativos hasta el momento.
En cuidados médicos
La víctima se mantiene bajo cuidado médico estricto y su estado es estable, aunque el proceso de recuperación será largo debido al dolor y las lesiones en rostro y manos. Este incidente ha generado preocupación entre vecinos y familiares, reavivando el debate sobre la seguridad en las comunidades y la necesidad de promover la convivencia pacífica en entornos residenciales.
Las autoridades locales hacen un llamado al respeto y la tolerancia para evitar que situaciones similares se repitan, e insisten en la importancia de denunciar cualquier hecho de violencia para garantizar la protección de los ciudadanos.

