Turismo gastronómico: viajar a través de los saboresTurismo gastronómico: viajar a través de los sabores

Tu paladar puede ser un gran pasaporte para viajar y conocer ciudades y rincones de todo el mundo. La curiosidad puede predisponerte a que te sumerjas en la degustación de platos típicos e incluso a que participes en degustaciones o talleres de cocina local.

Es que hoy el turismo gastronómico es un rótulo que cada vez se usa más para definir y dar forma a las motivaciones de cada viajero. Con los cinco sentidos a flor de piel, un buen plato puede evocar o transmitir las imágenes más vividas.

Se trate de mercados callejeros como de bodegas subterráneas así en rutas diseñadas para el turismo como en fogones improvisados, la cocina genera sus propios circuitos en todo el planeta. Con un idioma universal que solo precisa del apetito y de la curiosidad, conocer más sobre el turismo gastronómico te permitirá elegir de otro modo tu próximo destino de viaje.

¿Por qué crece el turismo gastronómico?

Al combinar el gusto por viajar con el placer de la comida, este tipo de turismo se impone como uno de los principales atractivos en cualquier rincón del planeta. Por obra y gracia de la fama de los chefs internacionales o por el auge de recetas caseras en usuarios de streaming, la gastronomía es tan motivadora como cualquier paisaje natural.

Además, siempre encontrarás vuelos económicos que te permitirán destinar parte de tu presupuesto a no perderte los manjares que cada región tiene preparados.

Tengas mayores o menores recursos para planificar tu hoja de ruta, es necesario antes de emprender cualquier viaje que tengas en claro algunas precisiones. Esto te permitirá elegir un destino que además de saciar tu gusto complete tus ganas y tu necesidad de conocer.

Turismo gastronómico: viajar a través de los sabores

¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir tu destino gastronómico?

Es así que si estás decidido a dejar que tu paladar guíe tu próximo destino puedes hacerte algunas preguntas que te den una mayor orientación. Tomate unos minutos para pensar y precisa cuáles son:

  • Gustos e intereses culinarios: Eres más partidario de lo dulce o de lo salado. ¿Te gusta la comida picante? ¿Eres clásico o experimental en los platos? Piensa cuál es el tipo de cocina que te gustaría probar como primer paso antes de cerrar tu equipaje.
  • Presupuesto: Cada condimento o preparación incide en el costo de tu plato. Así como no es lo mismo gourmet que tradicional, el costo del día a día cambia según cada país. Investiga si te conviene cambiar moneda antes de viajar y ajusta tus gastos a un presupuesto realista. Sin privarte de gustos no caigas en la gula.
  • Época del viaje: Como las frutas de estación, tu viaje estará marcado por el momento del año en que tengas previsto ir. Hay regiones con fiestas específicas que coinciden con el ciclo de producción y revalorizan la cocina local con la mejor cosecha. Un poco de información te ayudará a potenciar mejor tu experiencia.
  • Tipo de viaje: Vinculado a las experiencias a esta altura sabrás definirte como viajero y como tal tener en claro si gustas de una mayor participación en las actividades para aprender o simplemente quieres sentarte a contemplar y disfrutar del mejor plato en tu mesa.

¿Cuáles son los tipos de turismo gastronómico más conocidos?

En busca de precisar aún más el tipo de viaje que quieres realizar para que puedas conseguir con tiempo vuelos económicos deberás concentrarte en el tipo de comida que más disfrutes.

Así a grandes rasgos encontrarás diferentes tipos de gastronomía para elegir en base a tu inquietud y, ahora sí, sobre todo tu presupuesto.

  • Alta gastronomía: Como lo mostró la serie “El Oso” en este mundo los platos gourmet y los galardones con estrellas Michelin destacan por ser experiencias de nivel para compartir y darte un aire de distinción entre tus seguidores.
  • Gastronomía tradicional: También puedes encontrar en cualquier restaurant o taberna platos típicos que realzan la identidad y las raíces propias del lugar que visitas junto a platos universales, pero con el sabor local de cada sitio.
  • Gastronomía callejera: Ahora si buscas experiencias realmente gráficas, los puestos en la calle o los mercados donde se alternan comercios son el sitio ideal para que comas algo rápido y puedas compartir el ADN de tu visita.
  • Gastronomía orgánica: Algo alejados del centro urbano y de las grandes luces comerciales, puedes encontrar comercios que ofrecen menúes que se basan en ingredientes de productores locales con el foco puesto en la sostenibilidad.

¿Cuáles son algunas de las rutas gastronómicas más reconocidas?

Así como asociar una marca o producto a un valor determinado es una de las metas a las que aspira todo creativo, que un país sea sinónimo de un sabor o plato típico es un acierto. Esto potencia no solo la identidad del lugar, sino que, sobre todo, diversifica y referencia al lugar en todo el mundo.

Turismo gastronómico: viajar a través de los sabores

Algunos de los ejemplos más conocidos de este sello son:

Italia con sus rutas del vino y la pasta.

Así como la pizza, la pasta remite sin dudas a la Península Itálica. Puedes comprobarlo al recorrer regiones como Emilia-Romaña o la Toscana, Liguria o Lacio con rutas que destacan lo mejor del Mediterráneo en tours que resaltan los fideos y las salsas más frescas.

España con sus tapas y paella

Parte de la rutina diaria y convertido en acción, “irse de tapas” es mucho más que compartir un alto en la jornada. Implica comer porciones de ricos platos, de la preparación más sencilla o complementaria hasta la más compleja para acompañar un vino o un vermouth. Tan clásico como la paella valenciana, en tapas puedes encontrar desde albóndigas hasta jamón, queso y tortillas deliciosas.

México con su ruta del Mezcal

La comida picante, los tacos y las quesadillas necesitan de una copa de tequila o del mezcal si se quiere una experiencia más profunda. Con reminiscencias a las páginas de Castaneda y a sus Enseñanzas de Don Juan, los senderos aztecas animan a cualquier explorador a sumergirse en la mágica historia del continente americano.

Japón con el sushi

 Clases con maestros sushi y visitas a mercados como Tsukiji en Tokio. Así también el kaiseki servido puede resumir en una sola imagen la hospitalidad, estética y la cultura zen de toda la isla. 

Perú y el ceviche

De todas las capitales latinoamericanas, Lima es una de las que más sobresale por la calidad y diversidad de su gastronomía. Con una rica historia milenaria, el ceviche es un embajador de la cultura peruana junto a una multiplicidad de combinaciones que son únicas asociadas a la frescura de ciertos sabores.

¿Cuáles son algunos consejos para disfrutar de tu viaje?

Si es la primera vez que sientes tanta curiosidad por dejarte llevar por la variedad de platos que encuentres en tu destino lo mejor es que seas aventurero y estés decidido a probar platos que nunca tendrías en la mesa de tu hogar.

Así como cada vecino o habitante del lugar que pises te dará pistas sobre comercios o mercados locales que no puedes dejar de conocer. Una buena receta, los productos más frescos y un manojo de secretos te esperan a la vuelta de cualquier esquina.

Por último y no por eso menos importante: tómate el tiempo necesario y disfruta del ambiente de cada sitio al ciento por ciento. Inhala despacio, mastica suave, saborea con delicadeza, observa cada color en tu plato servido: haz de tu experiencia gastronómica un momento único e irrepetible.

¿Qué esperas para disfrutar del turismo gastronómico?

Lejos de ser una moda pasajera, el turismo gastronómico llegó para quedarse. Permite no solo conectar cada uno de tus sentidos sino también alimentar el alma con la cultura y las tradiciones de cada sitio.

Así como ver un paisaje o recorrer un museo, detenerte en un mercado o en una galería de tiendas de comida permite que reflexiones acerca de la identidad de cada lugar que recorres. Detrás de cada cubierto y de cada preparación hay una historia compartida.

Es por eso que déjate llevar por tu corazón y por tu estómago y planifica un buen viaje que contemple un buen sendero de sabores.