El hecho obligó al cierre temporal de vías en el sector de Tulcán y zonas aledañas al centro histórico, afectando la movilidad y generando pánico entre transeúntes, comerciantes y estudiantes.

Las autoridades policiales desplegaron unidades del ESMAD y patrullas para controlar la situación y restablecer el orden, mientras que se iniciaron labores de verificación para identificar a los responsables de los ataques.

Hasta el momento no se reportan personas heridas, aunque los enfrentamientos dejaron daños menores en la infraestructura y afectaciones al tránsito vehicular.

Habitantes del sector expresaron su preocupación por la repetición de estos hechos, que alteran la tranquilidad y afectan la actividad académica y comercial del sector.

Las autoridades locales hicieron un llamado al diálogo y a la resolución pacífica de los conflictos, rechazando cualquier tipo de violencia en el entorno universitario.