Madres de pacientes con enfermedades huérfanas y de alto costo retomaron este martes las protestas frente a la sede de Nueva EPS en Cali, denunciando la falta de atención médica, el incumplimiento de acuerdos recientes y la suspensión de servicios esenciales para sus hijos.

Las familias aseguran que, pese a los compromisos firmados hace un mes durante un plantón previo, la entidad solo cumplió parcialmente y por un corto periodo. Con el paso de las semanas, la atención volvió a deteriorarse.

Cancelación de convenios agrava la crisis

La situación se originó por las millonarias deudas que Nueva EPS mantiene con hospitales y clínicas del Valle del Cauca. Debido a la falta de pago, varios prestadores de salud cancelaron convenios, dejando a los pacientes sin opciones de atención.
Como consecuencia, se han suspendido citas médicas, entregas de medicamentos, exámenes especializados y procedimientos urgentes.

“Estamos viendo cómo dejan morir a nuestros hijos en la casa. Es una eutanasia pasiva”, expresó una de las madres presentes en la manifestación, denunciando la crítica situación emocional y médica que enfrentan.

Familias exigen respuestas inmediatas

Durante el plantón, las madres afirmaron sentirse cansadas de lo que llaman “mesas de seguimiento que no solucionan nada”.
“Nos pensamos quedar aquí hasta que haya respuestas reales. No nos moveremos sin garantías claras para la atención de nuestros hijos”, señaló una de las voceras del grupo.

Nueva EPS busca acuerdos, pero familias no confían

Desde la gerencia de comunicaciones de Nueva EPS informaron que continúan trabajando en soluciones con el acompañamiento de la Superintendencia Nacional de Salud. Sin embargo, las familias aseguran que ya no confían en nuevos compromisos y que mantendrán la protesta de manera indefinida.

Mientras tanto, los pacientes afectados siguen a la espera de tratamientos vitales, lo que incrementa la preocupación por su estado de salud y la capacidad del sistema para responder a tiempo.