Furiosa y muy molesta está la súper estrella, Sabrina Carpenter, y quién a través de su redes sociales le puso los puentos sobre la íes a la Casa Blanca, quién uso su canción ‘June’ en un video.
En un tono contundente y directo pidió a la administraciónde Donald Trump que «no la asocien a ella o a su música» con «programa inhumano».
«Nunca me asocien, ni a mí ni a mi música, para beneficiar su programa político inhumano»
Carpenter calificó de “malicioso y repugnante” el uso de uno de sus temas en un video difundido en la red social X por la Casa Blanca, desatando una nueva confrontación pública entre el mundo artístico y la política en EE.UU.
El video de la Casa Blnanca muestra arrestos realizados por autoridades de inmigración, acompañados por la canción ‘Juno’, lanzada en 2024 por la artista.
La reacción de la cantante fue inmediata y directa contra la administración.
El video de la Casa Blanca difundido en la cuenta oficial acumuló más de dos millones de reproducciones y está acompañadpo por un mensaje que divce: «¿Has intentado esto alguna vez? ¡Adiós!».
En las imágenes se puede ver a varias personas son perseguidas y esposadas.
Abigail Jackson, portavoz adjunta de la Casa Blanca, «No nos disculparemos por expulsar de nuestro país a peligrosos criminales ilegales asesinos, violadores y pedófilos».
Agregó Jackson que las personas que defienden a los migrantes son como «estúpidos» y son una referencia directa a quienes cuestionan estas políticas, incluida la cantante.




Gobierno de Trump y el uso de canciones:
Sabrina Carpenter no es la única a que el equipo del presidente Trump le ha usado su música para diferentes fines y otra de las afectadas fue Kenny Loggins quién exigió retirar un video.
Allí se usaba su canción ‘Danger Zone’, de la película Top Gun, para acompañar imágenes generadas por inteligencia artificial y que mostraban al presidente en escenas denigrantes hacia sectores de oposición.
En 2024, Céline Dion también condenó el uso no autorizado de ‘My Heart Will Go On’, y Beyoncé hizo lo propio con su tema ‘Freedom’, confirmando un patrón constante de choques entre artistas y el aparato político por la utilización de sus creaciones con fines de propaganda.

