En los últimos años, Colombia ha registrado un crecimiento significativo en el número de personas que dependen del uso de anteojos para sus actividades diarias. Aunque no existe una cifra oficial única que abarque a toda la población, diferentes entidades de salud visual estiman que cerca de la mitad de los colombianos presentan algún tipo de alteración visual, ya sea miopía, astigmatismo, hipermetropía o presbicia. Esto convierte la salud ocular en uno de los temas más relevantes para el sistema médico del país.

Los especialistas señalan que este aumento está fuertemente relacionado con los cambios en el estilo de vida. El uso prolongado de pantallas —computadores, celulares y tabletas— ha provocado un desgaste mayor en la visión, especialmente en jóvenes y adultos que pasan más de ocho horas al día frente a dispositivos digitales. Este fenómeno, conocido como “fatiga visual digital”, se ha convertido en una de las principales causas de consultas oftalmológicas.

Además, factores como la falta de descansos visuales, la iluminación inadecuada en espacios de trabajo y estudio, y el uso intensivo del celular desde edades tempranas han acelerado la aparición de defectos refractivos. En los niños, el aumento de la miopía ha sido particularmente notorio, debido a la disminución de actividades al aire libre y el incremento del tiempo en actividades de lectura o pantalla.

En adultos mayores, la presbicia continúa siendo la afección más común, una condición natural que se presenta a partir de los 40 años y que obliga a millones de colombianos a utilizar anteojos para tareas cotidianas como leer o escribir.

Los expertos en salud visual recomiendan realizar revisiones oftalmológicas al menos una vez al año, reducir el tiempo continuo frente a pantallas, mantener una distancia adecuada al usar dispositivos y promover actividades al aire libre, especialmente en los más jóvenes.

El crecimiento en la dependencia de anteojos refleja no solo cambios en los hábitos de la población colombiana, sino también la necesidad de fortalecer la educación en salud visual y el acceso a servicios de optometría y oftalmología en todo el país.