Colombia cerró la 14ª Conferencia Mundial de Alfabetización Mediática e Informacional de la UNESCO con un mensaje contundente: la tecnología debe servir a la humanidad, no al revés.

Durante dos días, más de mil participantes de todo el mundo se reunieron en Cartagena para definir el rumbo de la educación digital y el papel de la inteligencia artificial en los próximos años.

El Ministerio de Educación Nacional lideró el taller “Inteligencia artificial en educación superior: un análisis de la política pública a nivel internacional”, donde los asistentes analizaron tendencias globales, marcos normativos y desafíos de implementación.

El viceministro de Educación Superior, Ricardo Moreno Patiño, destacó que el país impulsa el Ecosistema Empático de Educación Superior, una estrategia que articula universidades, Estado y comunidades mediante seis misiones. Entre ellas sobresale la Misión de Tecnologías Convergentes, que promueve el uso de herramientas digitales para fortalecer la autonomía académica y ampliar el acceso a la educación.


Colombia comparte experiencias que inspiran al mundo

Colombia presentó proyectos innovadores que despertaron la admiración de los asistentes internacionales.
La Universidad del Magdalena expuso Aluna, un proyecto de inteligencia artificial diseñado con pertinencia territorial.

La Normal Superior María Inmaculada, en Manaure (Cesar), mostró su experiencia en la integración ética de la inteligencia artificial en la educación escolar.
Por su parte, el colegio Santa Teresa de Jesús, en El Banco (Magdalena), presentó “Espejo de Emociones: Aura”, una herramienta pedagógica que ayuda a estudiantes y docentes a gestionar las emociones.

Ambas iniciativas integran los Centros de Interés para la Formación Integral en Ciencia, Tecnología e Innovación, que el Ministerio de Educación promueve en diversas regiones del país.


💬 Un cierre con propósito

En la clausura, el viceministro Moreno invitó al mundo a poner la ética y la empatía en el corazón de la revolución digital:

“Que la ética y la empatía sean el corazón de la revolución digital, no su nota al pie; que el pensamiento crítico sea su brújula, no su víctima; que ninguna nación quede atrás en una carrera que debería ser colaboración. Soñemos con una humanidad que no tema al progreso, pero que tampoco olvide su alma”.

Con esta participación, el Ministerio de Educación Nacional reafirmó su compromiso de promover el uso responsable de las tecnologías, con la verdad como principio y la vida como propósito fundamental.