Con tres fechas disputadas en el Torneo Nacional de la Primera C, Deportivo Neiva empieza a encontrar su rumbo. Y uno de los jugadores que ha alzado la voz con claridad y autocrítica es Andrés Ramos, quien analizó sin tapujos la realidad del equipo en este arranque de competencia. Entre logros y tropiezos, el mediocampista dejó claro que, aunque el camino ha tenido baches, el equipo va en buena dirección.
“No, sí, yo creo que nos costó un poco el inicio del torneo”, reconoce Ramos, con la sinceridad que caracteriza a quienes entienden que los procesos necesitan tiempo. Las primeras fechas no fueron fáciles para Deportivo Neiva, que se encontró con rivales aguerridos y un ritmo competitivo que exigía precisión desde el primer minuto.
Sin embargo, el equipo no se quedó en lamentos. “Nos hemos venido acoplando muy bien en estas dos semanas”, agregó el volante, destacando el trabajo colectivo que ha permitido mejorar el engranaje tanto en defensa como en ataque.
La casa se respeta
Para Ramos, hay un punto clave en el repunte reciente del equipo: la fortaleza en condición de local. “Eso se ha visto ratificado en los dos partidos de local”, comentó, con evidente satisfacción. Deportivo Neiva ha demostrado que jugar en su tierra no es solo una ventaja logística, sino un asunto de orgullo.
Compromiso
Más allá de los resultados, hay una actitud que resalta por encima del resto: el compromiso del grupo. “Yo creo que todos estamos comprometidos acá con el equipo. Sin importar el rival, si va de primero o de último, siempre tenemos que salir con el mismo ímpetu a jugar los partidos”, afirmó Ramos, dejando claro que no hay lugar para la confianza ni para las excusas.
Cada encuentro se disputa como si fuera una final. Ese es el mensaje que se respira en el camerino del Deportivo Neiva, y que los hinchas empiezan a ver reflejado en la cancha.
Autocrítica
Uno de los aspectos más valiosos del discurso de Andrés Ramos es su capacidad de autocrítica. “Hemos tenido algunas falencias en la parte colectiva, tanto en defensa como en ataque”, reconoció sin titubeos. Lejos de maquillar errores, el jugador los señala con claridad, como parte de un proceso de mejora constante.
Consolidándose en casa 