Quién era Luis Alberto Clavijo

Luis Alberto Clavijo tenía 48 años al momento del accidente.

Trabajaba como taxista: cada día salía a trabajar largas jornadas — a veces hasta 14 horas diarias — para cubrir los costos del taxi, la gasolina, lavado del vehículo, y llevar algunos ingresos a su hogar.

Su rutina era cotidiana: en la mañana salía de su casa (según los reportes, alrededor de las 5:00 a.m.) para iniciar su jornada.

Su jornada ese día terminó en lo que iba a ser su última carrera. Clavijo decidió tomar un servicio corto, con la intención de terminar temprano e ir a cenar en familia. De hecho, había dicho a su esposa que estarían juntos sobre las 7:00 p.m. — nunca regresó.

Qué pasó: el accidente

El siniestro ocurrió el 2 de marzo de 2022, en la intersección de la Avenida Circunvalar con calle 84 — en el norte de Bogotá.

Una volqueta con cargamento (arena, según los reportes iniciales) aparentemente perdió el control — rompió la baranda de contención, invadió el carril contrario, embistió múltiples vehículos y finalmente cayó sobre varios de ellos, entre ellos el taxi de Clavijo.

El impacto fue brutal: Clavijo sufrió un trauma craneoencefálico severo y murió en el acto.

En total, el accidente dejó dos personas muertas: Clavijo, como conductor del taxi, y uno de sus pasajeros — que falleció horas después por las heridas sufridas. Además hubo varios heridos que fueron trasladados a centros hospitalarios.

Impacto humano: una vida dedicada al trabajo que terminó abruptamente

Clavijo representaba a muchas personas que día a día se esfuerzan para sostener su hogar mediante labores honestas y duras. Su muerte sacudió a familiares, compañeros taxistas y personas en general porque ilustra la vulnerabilidad de quienes trabajan en la calle.

Su esposa y su familia quedaban con el dolor, sin saber que aquella “última carrera del día” resultaría ser la trágica última. Según los testimonios, la chaqueta oscura que él vestía esa mañana — un regalo reciente de su esposa — fue la prenda mediante la cual la familia lo identificó tras el accidente.

El accidente también provocó daños a infraestructura: la baranda de contención de la vía quedó destruida, lo que requería reparación.

Cómo quedó el caso y las consecuencias

Tras el accidente, tanto la vía como las autoridades responsables de movilidad en Bogotá comenzaron gestiones para reconstruir el muro de contención afectado en la avenída — lo que implicó cierres temporales de carriles y obras de reparación.

La tragedia generó indignación social, en parte por la magnitud del accidente (varios vehículos involucrados, víctimas mortales y heridos), y en parte por las reflexiones que impulsó sobre seguridad vial, mantenimiento de vías y responsabilidad de vehículos de carga pesada en zonas urbanas.

Para muchos, la historia de Clavijo se convirtió en un símbolo de las consecuencias humanas que pueden tener fallas mecánicas o negligencia vial.