Un oscuro panorama se empieza a vivir en Colombia, a consecuencia de la implementación de la reforma laboral, lo que se hizo evidente al conocerse los resultados de la encuesta Bitácora Express, realizada por la Federación Nacional de Comerciantes, Fenalco.
Nos parece que se trata de una situación que se veía venir, puesto que ya con suficiente antelación los analistas y especialistas económicos habían advertido sobre los enormes riesgos que ofrecía la reforma laboral, tal como había sido concebida. Quizá no se puede negar la intención de favorecer a los trabajadores, pero en ese objetivo no hubo el necesario equilibrio entre los beneficios y los perjuicios a los que se podrían ver abocado el sector empresarial privado, enfrentado de la noche a la mañana a un incremento en las obligaciones salariales.
La realidad, que se esperaba, es la gran preocupación que muestran los empresarios colombianos ante los efectos que ya son evidentes en el ámbito empresarial del país, lo que se refleja en las decisiones de contratación y en la sostenibilidad financiera de las empresas, las que, en estos momentos, le han abierto las puertas a unos tiempos de incertidumbre.
Lo cierto es que las cifras de la encuesta comienzan a preocupar, puesto que, a pocos días de la puesta en vigencia de la reforma laboral, el 52% de los empresarios, manifestó que en lo que resta del presente año, no tiene entre sus proyecciones aumentar su planta de personal, mientras que un 35%, expresó que las difíciles condiciones que tendrán que afrontar, los obligará a reducciones en sus nóminas, las cuales podrían llegar a un 20%, mientras que un 67% del sector privado considera que el incremento proyectado por Fenalco en los costos laborales, entre el 18 y el 34 por ciento, tendrá un duro impacto sobre sus empresas.
Esto quiere decir que ante el temor de los empresarios habrá una alarmante parálisis en los niveles de contratación, a la vez que se corre el riesgo de que se inicien procesos de despidos, ante el temor que representa para los empresarios, asumir más costos laborales. Se trata de una inquietud que sin duda alguna será la causa para que los empresarios sean más cautos en lo que tiene que ver con la incorporación de más trabajadores, ya que una carga laboral excesiva, podría en un momento dado, dar lugar a grandes crisis económicas.
Igualmente, la encuesta reveló que otro fuerte dolor de cabeza para los empresarios, es el referente a los horarios diurnos y nocturnos, ya que el 52% prevé un aumento importante aumento en los pagos por recargos, lo que se constituiría en otro factor en contra de la ya difícil sostenibilidad de las empresas.
También es motivo de inquietud el recargo dominical lo que se anticipa será bastante perjudicial para el comercio, que como se sabe, mantiene una constante actividad, los días domingos y festivos, lo que, sin duda alguna, será motivo para que, en las fechas mencionadas se reduzca de manera drástica el número de trabajadores.
Nos enfrentamos a un panorama sombrío, puesto que son numerosas las empresas que ya han apelado a medidas internas para hacerle frente al aumento de los gastos, como la reducción de aprendices y horarios, en tanto que también se anuncia prescindir del personal que no tenga contrato indefinido. Lo que nos lleva a pensar en este caso de la reforma laboral, que fue peor el remedio que la enfermedad.