Brayam Armando Rocha Vargas, el soldado condenado por asesinar a su compañero de batallón en el año 2021, volvió a protagonizar un hecho judicial al violar el beneficio de prisión domiciliaria que le había sido otorgado. Aunque debía estar recluido en casa de sus abuelos, en el barrio Panorama de Neiva, fue sorprendido por la Policía circulando en motocicleta por Campoalegre, lejos de su lugar de reclusión.
El episodio ocurrió el 30 de noviembre de 2023, cuando patrullas policiales lo detuvieron durante un operativo en la vereda La Vega. Tras verificar su identidad, descubrieron que Rocha Vargas tenía una condena de ocho años por el homicidio del soldado Robinson Caldón Rivera, ocurrido dentro del Batallón Pigoanza de Garzón. Fue arrestado por el delito de fuga de presos.
Al igual que en el caso del homicidio, el joven de 24 años volvió a negociar su pena con la Fiscalía, aceptando cargos para obtener una rebaja. La jueza Séptima Penal del Circuito de Neiva lo condenó a dos años y ocho meses adicionales de prisión, esta vez por haber incumplido deliberadamente su arresto domiciliario.
Sobre el crimen original, las autoridades recordaron que Rocha disparó a Caldón durante un cambio de guardia, usando un fusil Galil. Aunque inicialmente fue acusado por homicidio agravado doloso, su defensa logró que la conducta se calificara como culposa, lo que permitió un castigo más favorable.
Rocha Vargas, quien ya había recibido formación en el uso de armas y servicio como centinela, fue considerado plenamente consciente de sus actos tanto en el asesinato como en su posterior fuga.

