El acceso vascular es un procedimiento que permite insertar dispositivos en vasos sanguíneos, principalmente venosos, para administrar tratamientos, tomar muestras o monitorear el estado de salud del paciente. Este es uno de los procedimientos más frecuentes en la atención médica, pero también una de las principales fuentes de incidentes y eventos adversos para los pacientes.
La “guía para el cuidado del acceso vascular en adultos” resalta que más del 70% de las personas hospitalizadas portan algún acceso vascular. Además, muchos pacientes que requieren exámenes, estudios contrastados o procedimientos como endoscopias, imágenes diagnósticas o cirugías menores, también necesitan acceso venoso.
La inserción repetitiva de catéteres intravenosos periféricos en personas con difícil acceso venoso puede causar complicaciones como flebitis, infecciones, infiltraciones y dolor persistente, afectando no solo la eficacia del tratamiento, sino también la experiencia emocional y física del paciente, afirma la Infusion Nurses Society (INS).
En casos graves, como quemaduras, traumas o pacientes en unidades de cuidado intensivo, puede presentarse una infección por catéter llamada sepsis por catéter, que pone en riesgo la vida. Por eso, es clave tomar medidas preventivas y brindar una atención segura, especialmente a los más vulnerables. Esta situación ha sido ampliamente reconocida por el personal de salud como un reto que requiere intervención clínica y humanizada.
En consecuencia, en la Clínica Salud Social de Sincelejo, Sucre, ha implementado un programa institucional de accesos vasculares como parte de los esfuerzos por mejorar la atención y reducir complicaciones relacionadas con el uso de catéteres. Esta iniciativa busca no solo disminuir incidentes y eventos adversos, sino también fortalecer la capacitación continua del personal de salud y promover el uso responsable de herramientas tecnológicas. Al apostar por este enfoque, la Clínica busca ofrecer una atención más humana, segura y respaldada tecnológicamente, que genere confianza tanto en los profesionales como en los pacientes.
Es así, como la enfermera profesional, Virginia Villadiego, de la Coordinación de Enfermería de la Clínica Salud Social, explica que a partir de la incorporación del programa de accesos vasculares con el sistema del catéter central de inserción periférica (PICC) como solución integral de BD, empresa líder en tecnología médica, “nos ha permitido realizar inserciones más seguras y precisas, especialmente en pacientes con difícil acceso venoso. Esto suele ocurrir por su estado de salud, antecedentes médicos o tratamientos prolongados”.
Esta iniciativa representa mucho más que una mejora técnica. Según Desirée Torres, directora asociada de la unidad de administración de medicamentos de BD, “La tecnología no reemplaza lo humano, lo potencia. Esta herramienta permite al personal de salud dar un paso firme hacia una atención que ve al paciente no como un caso, sino como una persona con emociones, miedos y dignidad, al mismo tiempo que asegura su acceso al tratamiento adecuado y prescrito por el equipo médico que lo respalda”.
Te interesa: México: Colgados y decapitados, 20 cuerpos dentro de una camioneta en Sinaloa
Más para leer: «Gracias Mamá Nydia» Fundación de la Solidaridad por Colombia, «Mujer excepcional»
Te interesa: Sin su nieto, Miguel Uribe, así serán las honras fúnebres para despedir a Nydia Quintero

