La construcción de la Línea 1 del Metro de Bogotá alcanzó un importante hito con la finalización de los primeros seis kilómetros de viaducto, un avance que representa más del 57% del total de las obras y que refleja el compromiso con la modernización del sistema de transporte de la capital colombiana. Esta megaobra, que conectará el suroccidente con el nororiente de la ciudad, promete transformar la movilidad de millones de bogotanos, reduciendo tiempos de viaje y mejorando la calidad de vida urbana.

El viaducto construido se extiende por tramos clave de la ciudad, incluyendo la Avenida Villavicencio, la Avenida Primero de Mayo, la Autopista Sur, la Calle Octava Sur y la Avenida Caracas, en localidades como Bosa, Kennedy, Antonio Nariño, Los Mártires y Santa Fe. Este avance permite a los habitantes de estas zonas visualizar el progreso tangible de la obra, que se desarrolla con un equipo de más de 13.000 trabajadores y 215 frentes de trabajo activos, incluyendo labores nocturnas para acelerar el cronograma.

La Línea 1 tendrá una longitud total de 23,96 kilómetros y contará con 16 estaciones, de las cuales 10 estarán conectadas directamente con el sistema TransMilenio, facilitando la integración multimodal. El recorrido unirá la localidad de Bosa con la calle 72, reduciendo el tiempo de viaje a aproximadamente 27 minutos, lo que representa un cambio significativo frente a las actuales condiciones de movilidad en la ciudad.

Además del avance en el viaducto, se han instalado más de 6.600 pilotes y se han colocado más de 2.000 dovelas, piezas fundamentales para la estructura del metro. En el patio taller de Bosa, se han instalado más de 5.500 metros de rieles, preparando el terreno para la llegada del primer tren, previsto para septiembre de 2025, cuando se iniciarán las pruebas técnicas de rodaje.

El proyecto, que comenzó formalmente en 2020, es el resultado de décadas de planificación y espera por un sistema de transporte masivo eficiente en Bogotá. La administración distrital, liderada por el alcalde Carlos Fernando Galán, ha destacado la obra como una solución histórica para la movilidad de la ciudad, con un impacto positivo en la descongestión vehicular y la reducción de la contaminación ambiental.

Finalmente, la ciudadanía puede seguir de cerca el trazado y las estaciones del Metro a través de plataformas digitales como Mapas Bogotá, que permiten conocer en tiempo real el avance y la ubicación exacta de las obras. Este nivel de transparencia y comunicación fortalece la confianza en el proyecto y mantiene informados a los bogotanos sobre el futuro de su movilidad urbana.