El Gobierno Nacional de Colombia, a través del Departamento de Prosperidad Social (DPS), anunció una transformación significativa con los subsidios en Colombia. Se trata de una nueva forma de apoyar a las poblaciones vulnerables del país.
Según declaraciones recientes, las transferencias monetarias, que actualmente benefician a millones de familias, serán reemplazadas gradualmente por proyectos productivos enfocados en la asociatividad.
Gustavo Bolívar, director del DPS, confirmó en una entrevista otorgada a EL TIEMPO que esta estrategia busca fomentar la autosuficiencia y el emprendimiento entre los beneficiarios.
«El presidente quiere que las transferencias se acaben con el tiempo y que se vayan convirtiendo en proyectos productivos. En vez de darles un subsidio, les vamos a poner el capital semilla para que se asocien con otras personas del municipio para montar proyectos», explicó Bolívar.
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Bolívar destacó que, aunque actualmente se entregan transferencias a 2,8 millones de familias, la creación de iniciativas productivas permitirá un uso más eficiente de los recursos. «Si se unen, por ejemplo, 100 arroceros para montar un molino o unos pescadores que quieren sembrar tilapia, van a contar con nuestro apoyo», añadió.
Transición de subsidios en Colombia a largo plazo
El director del DPS señaló que este cambio de subsidios en Colombia se implementará en el largo plazo. «Yo quedaría muy satisfecho si llegamos a tener 1.000 cooperativas que reúnan a unas 50.000 personas entre este y el próximo año. Serían 50.000 subsidios menos que se pagan«, indicó Bolívar.
Anteriormente, el programa Familias en Acción beneficiaba a 1,4 millones de familias con transferencias de 160.000 pesos. Con la nueva estrategia, se planea otorgar mayores recursos a menos personas, incentivando a las 900.000 familias restantes a formar asociaciones productivas.
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En cuanto al impacto de los subsidios en la reducción de la pobreza, Bolívar fue claro: «Que una transferencia de 80.000 pesos, 200.000 o incluso 500.000 mensuales saca a alguien de la pobreza es mentira, pero sí cuando los asociemos y puedan trabajar y convertirse en empresarios».
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Excepciones a la nueva política
A pesar de estos cambios, el director del DPS aseguró que ciertos grupos vulnerables seguirán recibiendo beneficios. Las madres cabeza de hogar y los adultos mayores no perderán su apoyo económico, garantizando así la protección de quienes más lo necesitan.
El anuncio del DPS marca un giro importante en la política social de Colombia, orientado hacia el fomento de la autosuficiencia y el desarrollo económico sostenible. A medida que las transferencias monetarias se transformen en proyectos productivos, se espera que las comunidades vulnerables puedan mejorar sus condiciones de vida. Esta se haría a través del emprendimiento y la asociatividad.
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