El registrador nacional, Hernán Penagos, ha salido al paso de las críticas gubernamentales sobre la organización de las recientes consultas populares del Pacto Histórico, asegurando que la Registraduría Nacional cumplió a cabalidad con su labor. Penagos destacó que todo el material electoral fue dispuesto y la ciudadanía pudo ejercer su derecho al voto sin mayores dificultades, con un procesamiento de información riguroso.
Participación ciudadana
Más de 2.700.000 personas ejercieron su derecho al voto, y aunque en algunos lugares hubo mayor afluencia, especialmente donde votaron adultos mayores, se activaron protocolos para fraccionar las mesas. Penagos enfatizó que los puestos de votación se instalaron en coordinación con la fuerza pública y el Ministerio de Defensa, garantizando la seguridad de la información, testigos y jurados.
El registrador resaltó que se instalaron 20.000 mesas en todo el territorio nacional, una cifra acordada con los partidos políticos y significativamente mayor que las 9.000 mesas instaladas en la consulta del Partido Liberal en 2017. Además, por primera vez en una consulta, se instalaron 3.500 mesas rurales, lo que demuestra un esfuerzo por ampliar la cobertura.
Lamentó incidentes
El registrador lamentó los incidentes ocurridos durante la jornada, como la amenaza a la registradora de Yopal por parte de las disidencias de las FARC, lo que requirió la intervención de los órganos de seguridad. También expresó sus condolencias por el fallecimiento de una funcionaria en un accidente de lancha, destacando el riesgo que asumen miles de personas al prestar este servicio.
Las urnas se cerraron a las 4 de la tarde, y a las personas que aún estaban en la fila se les permitió ejercer su derecho al voto. Penagos explicó que, al tratarse de consultas populares, los partidos políticos son los encargados de declarar los resultados, recibir reclamaciones y definir el orden de cámara y senado, con la Registraduría prestando apoyo según la Ley 1475.
Transparencia e integridad
Penagos también defendió la transparencia de la Registraduría y su equipo, señalando que los resultados son evidentes y que la democracia en Colombia ha funcionado correctamente. Hizo un llamado a la ciudadanía a confiar en una entidad que trabaja con juicio y que cuenta con los soportes de los resultados en las actas electorales.
En respuesta a las declaraciones del ministro del Interior, Armando Benedetti sobre la supuesta reducción de mesas en zonas rurales donde el petrismo es más fuerte, Penagos aclaró que las 20.000 mesas fueron acordadas el 3 de octubre con todas las organizaciones políticas, incluyendo el Partido Unión Patriótica, Polo Democrático, Colombia Humana y Partido Comunista Colombiano.
Ubicación de meses se definió
Reiteró que la ubicación de las mesas y puestos de votación se definió de acuerdo con el despliegue operativo de las fuerzas militares y de policía en todo el país. Esta coordinación buscaba garantizar que todas las mesas estuvieran acompañadas de la fuerza pública para proteger a testigos, jurados y asegurar el libre ejercicio al voto.
Acusaciones injustas
Penagos aseguró que todas las decisiones y acuerdos están documentados en actas de reuniones realizadas desde agosto con las organizaciones políticas. Subrayó que la Registraduría cumple cabalmente con su proceso y cuida la democracia de Colombia, y que es injusto culparla por circunstancias que fueron dialogadas y acordadas.
Finalmente, Penagos mencionó que el costo de estas consultas fue de 130.000 millones de pesos, una cifra significativa menos a los 2 billones de pesos que hubiera costado si se hubieran convocado a 125.000 personas, lo que demuestra la deficiencia en despliegue y el acuerdo alcanzado con los partidos desde el 3 de octubre.