Se sellan dos bares que operaban como sindicatos

La lucha contra los establecimientos ilegales en Bogotá sigue dando resultados. En medio de un operativo conjunto realizado por la Policía Metropolitana y la Secretaría de Seguridad, en el barrio Restrepo (localidad de Antonio Nariño), las autoridades descubrieron múltiples irregularidades en bares que operaban al margen de la ley, uno de ellos incluso escondido bajo la figura de un supuesto sindicato.

Durante la intervención, fue hallada una menor de edad consumiendo licor dentro del establecimiento, un hecho que encendió las alarmas y obligó al cierre inmediato del local. Al momento de la llegada de los uniformados, varios asistentes intentaron deshacerse de sobres con drogas, arrojándolos al suelo. Como resultado, se incautaron 64 dosis de tusi y marihuana, además de bebidas alcohólicas presuntamente adulteradas.

Fachadas para la ilegalidad

Uno de los aspectos que más preocupa a las autoridades es el uso de estructuras legales como los sindicatos para camuflar actividades clandestinas. Según informó el secretario de Seguridad, César Restrepo, estos lugares no solo funcionan sin los permisos requeridos, sino que también permiten el ingreso de menores, comercializan licor de dudosa procedencia y son usados como puntos de venta de estupefacientes.

«Estos establecimientos disfrazados de sindicatos están contribuyendo a la inseguridad y al deterioro de la convivencia. Vamos a cerrar cada uno de ellos y llevar a los responsables ante la justicia», señaló Restrepo, quien también advirtió que los operativos se intensificarán.

Más cierres y controles en la zona

Otro bar de la zona también fue cerrado por no cumplir con los requisitos de funcionamiento exigidos por la ley. El despliegue contó con el apoyo de unidades especiales del Gaula, personal de inteligencia y equipos de la Secretaría de Seguridad, quienes verificaron los antecedentes de los asistentes y revisaron minuciosamente cada rincón de los locales intervenidos.

Esta intervención se enmarca en la estrategia Bogotá Camina Segura y en el Plan Integral de Seguridad, Convivencia Ciudadana y Justicia (PISCCJ), con énfasis en la protección de menores y la recuperación de zonas críticas de la ciudad.

Las autoridades reiteran el llamado a la ciudadanía para denunciar cualquier establecimiento que funcione sin control y ponga en riesgo la integridad de los habitantes. La ofensiva contra el crimen en espacios de ocio continúa.

Por Gina Soto