La eliminación del Barça en la Champions ante el PSG debería acelerar la toma de decisiones respecto al próximo entrenador del equipo. Aunque el club está aún asimilando el golpe, su enfoque se centra en el clásico del domingo próximo. Una victoria situaría al equipo a cinco puntos del Real Madrid, ofreciendo una oportunidad para remontar en la Liga. Sin embargo, cualquier otro resultado significaría prácticamente despedirse del campeonato, dejando las decisiones para la próxima temporada sin impacto en el presente.
Xavi anunció su marcha tras caer ante el Villarreal en enero y ha reafirmado su decisión desde entonces. Aunque la directiva, encabezada por Joan Laporta y Rafa Yuste, ha expresado su deseo de que Xavi reconsiderara su posición, parece poco probable que eso ocurra. Se ha mencionado que la única opción para un cambio sería una inversión de 200 millones de euros en refuerzos, algo fuera del alcance del club.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/YF6JTSSZHJDJ3G3F2Y2LRQMPJA.jpg)
DESCUBRA TAMBIÉN: Pasó lo imposible: PSG liquidó al Barcelona
Con Xavi prácticamente descartado, el director deportivo Deco se verá obligado a elegir un nuevo entrenador. La preferencia parece inclinarse hacia Rafa Márquez, actual técnico del filial, quien ha tenido éxito previo en el club. Márquez ha destacado por su labor en el equipo B, actualmente en segunda posición en su grupo de Primera RFEF y con un enfoque en el desarrollo de jóvenes talentos, una prioridad para el Barça.
Aunque se contemplaron otras opciones, como la vía alemana con Hansi Flick, la mayoría han sido descartadas por diversas razones. Incluso el retorno de Luis Enrique, ahora en el PSG, fue considerado pero no viable. Roberto de Zerbi, entrenador del Brighton, también fue evaluado, pero su estilo de juego y el costo de su traspaso lo hicieron poco atractivo.
Con tantas opciones descartadas, parece que la elección de Márquez como próximo entrenador del primer equipo es casi segura, a menos que haya un cambio radical en la situación. Deco ya ha insinuado esta posibilidad en reuniones recientes.